Ediciones
Resultados
Síguenos en
Hola

F1 | CHINA

La extraña curiosidad de Newey frente al McLaren MCL34

El ingeniero británico pasó varios minutos estudiando el coche de Sainz en la parrilla de Bahréin antes de manifestar que han dado "un paso adelante".

Shanghai
Adrian Newey investigó el McLaren MCL34 de Carlos Sainz en Bahréin.

No fue tan exagerado como cuando Vettel tocó el coche de Hamilton, con los dedos, después de una sesión de clasificación. A los pilotos no les suele gustar que otros se acerquen demasiado a su monoplaza para investigar sus particularidades, así que probablemente a los equipos tampoco. Pero en la parrilla de Sakhir fue Adrian Newey, el gran ingeniero aerodinámico de Red Bull, quien se acercó sin disimulo al McLaren MCL34 de Carlos Sainz, después al de Lando Norris, para mirarlo de arriba abajo, de atrás hacia delante, durante varios minutos. Curiosamente, unos días después manifestaba en un podcast que es "un buen coche, un paso hacia delante" para Woking.

El británico también echó un vistazo sobre el Alfa Romeo de Kimi Raikkonen, que estaba aparcado entre los dos McLaren, aunque fue más breve antes de volver la vista al coche naranja, para regresar, despacio, hacia el Red Bull RB15 de Max Verstappen. Unos instantes después, esos dos monoplazas se encontrarían en la pista, Sainz tenía ritmo para intentar un adelantamiento sobre Max, aunque el toque entre ambos por la dura defensa del holandés evitó el cambio de posiciones y retrasó, quizás a este gran premio, el próximo encuentro de estos pilotos en el asfalto.

No es un secreto que Red Bull tiene problemas de chasis y que McLaren, al menos esta vez, parece haber corregido los suyos en lo que a aerodinámica se refiere. El RB15 no termina de alcanzar una configuración adecuada, "parece un coche de rallycross", dijo Helmut Marko, sin culpar a un motor Honda que puede haber superado a Renault esta temporada. Y el MCL34, por su parte, sufre con la fiabilidad tanto en su unidad de potencia como en otras partes estrechamente relacionadas como la caja de cambios o los escapes, pero la estructura del coche está a la altura del fabricante, por rendimiento puro puede convertirles en el cuarto coche de la parrilla si no hay averías, sorprendentemente cerca de Red Bull en ocasiones. Quizás eso inquiete a Newey, y por eso estaba curioseando frente al McLaren.