Oficial: Alonso llevará motor Chevrolet en la Indy 500

Un ingeniero de un equipo que debió ser rival de Fernando Alonso en estos últimos años de Fórmula 1 lo decía en privado. “Para mí lo más impresionante de Fernando no han sido sus títulos en F1, ni el adelantamiento en la 130R a Schumacher, ni estar a punto de ganar el Mundial con aquellos Ferrari, lo mejor que ha hecho es llegar a las 500 Millas de Indianápolis sin apenas haber probado ese coche y estar a punto de ganar. Pero le perseguía la maldición de Honda”, explicaba con acento británico en un primitivo español a este periodista en Abu Dhabi. Lejos ya de aquella mala suerte japonesa el español intentará llevarse la Indy 500 a la segunda y completar la Triple Corona. 

Si no lo logró en 2017 cuando estaba en condiciones de hacerlo, de hecho llegó a ser líder durante 27 vueltas, fue porque su motor Honda se rompió. Ahora lo intentará con el propulsor rival, tal y como adelantamos en As, un Chevrolet que motorizará su McLaren de Indianápolis. Así se ha hecho oficial esta mañana mientras Alonso entrenaba equilibrio con sus fisios de cabecera en Italia. El motor será un V6 biturbo de inyección directa de 2.2 litros con el que las dos marcas retoman una alianza después de 47 años, un propulsor que ha ganado tres veces desde que en 2012 comenzarán a distribuir motores a los coches de Indy, de hecho estos motores han ganado 73 de las 118 carreras disputadas y en el campeonato han ganado cinco veces en pilotos.

Recordemos que no será la primera vez que Alonso lleve motores de General Motors ya que pronto participará en las 24 Horas de Daytona con un Cadillac, marca que pertenece a esta compañía. El asturiano se mostraba entusiasmado: “Será un privilegio, tener motores Chevrolet significa para mí que nos colocamos en la mejor posición posible para competir por la victoria. Pude comprobar la potencia de Chevrolet hace unos días en el Nascar de Jimmie y me gustó. La oportunidad de participar en las 500 Millas de Indianápolis es un honor, así que estoy orgulloso de que Chevrolet sea parte del equipo”. 

Tanto la prueba de Nascar como las Daytona 24 y el motor de Indianápolis corresponden a un gran acuerdo con GM. Mientras Zak Brown también mostraba su entuasismo: “McLaren y Chevrolet tienen un palmarés compartido en el automovilismo norteamericano y la oportunidad de unir a ambas marcas para este evento tan especial era demasiado especial para dejarla pasar. Como McLaren, Chevrolet lleva la competición en la sangre. La reputación de la compañía en la IndyCar y en esta carrera tan especial es de primera clase y será un socio potente”.

Bob Fernley, que llega de la F1 para hacerse cargo del equipo McLaren de Indy 500 hablaba de la profesionalidad de Chevrolet: “Nuestra asociación con Chevrolet es una parte clave de nuestro plan para correr en las 500 Millas de Indianápolis. Como motor ganador, el Chevrolet nos coloca en una posición sólida para participar en este evento que supone un reto grandísimo. Son unos profesionales absolutos, están comprometidos con el reto y son verdaderos competidores”.

Y por último Jim Campbell, vicepresidente de rendimiento de vehículos y automovilismo de Chevrolet en Estados Unidos declaraba su felicidad por unirse a McLaren y al piloto español: “Es emocionante asociarnos con Fernando Alonso y McLaren para las 500 Millas de Indianápolis 2019. Fernando incorpora un talento de pilotaje increíble y una gran pasión por el deporte y por ganar las mejores carreras del mundo”. Esperemos que la maldición de Honda haya acabado y el motor estadounidense permita a Alonso conseguir la Triple Corona.