Casado: "He renunciado a un sueldo de 86.000 euros"

Corren nuevos tiempos en la Real Federación Motociclista Española, la RFME. Se nota un soplo de aire fresco y una inquietud por modernizar su casa cuando se habla con Manuel Casado, que cumple estos días un año como presidente de las motos y que ya fue vicepresidente con Juan Álvarez, al que siguieron Joan Moreta, que en paz descanse, y Ángel Viladoms. Tras un proceso muy convulso que retrasó un año su llegada al cargo, la Asamblea le dio a Casado 81 votos a favor, por sólo tres en contra, y lo primero que hizo este madrileño que hoy tiene 59 años es cumplir con una de sus promesas electorales: quitarse el sueldo que le correspondía como presidente. Y pedazo de sueldo era…

“He renunciado a un sueldo de 86.000 euros anuales porque no lo necesito y porque prefiero que se invierta en el motociclismo”, asegura Casado en el arranque del almuerzo que compartió ayer con As en Casa Juan. Y se explica: “Estoy en el mundo de la moto desde siempre y sin cobrar, de organizador, de piloto, de promotor, y no era cuestión cobrar por ser presidente. Y también he limitado a dos legislaturas como máximo la presidencia”. ¿Por qué? Lo tiene muy claro: “Porque te quemas en el cargo y porque así puede entrar gente con ganas e ideas nuevas. Hay muchos intereses en el motociclismo más allá de la velocidad, que tan bien gestiona Dorna, y se pueden camuflar muchas cosas por debajo. De ese modo no se apoltrona nadie en el cargo”.

Este empresario no oculta que le va bien en su negocio, de ahí que pueda permitirse una renuncia como la que ha hecho. “Tengo mi empresa de materiales de construcción, especializada en hormigón y áridos, y en áridos somos la primera empresa de Madrid”, y eso no le impide por el momento compaginar sus funciones presidenciales, para la que tiene un primer objetivo prioritario: “Lo que quiero es pegarle una cambio a la Federación. Hemos llegado porque pensábamos que la gestión que había no era buena. Había muchos triunfos, pero todo desorganizado. En la Federación se hacía lo que le daba la gana a Viladoms”. Se refiere a Ángel Viladoms, el anterior presidente, que no sale bien parado cuando Casado se ha puesto a tirar de la manta. “Hemos hecho una auditoría propia, porque la del Consejo Superior de Deportes de todos los años sólo es para ver que lo que aporta el Consejo se gasta en el deporte, y eso son sólo 700.000 u 800.000 euros de los 2,4 millones que tenemos de presupuesto”, dice antes de entrar en detalle...

Ahí va eso: “Viladoms estuvo cobrando el sueldo como presidente hasta el 4 de julio de 2017 y el 21 de junio de 2016 se había terminado su mandato electoral. Nuestra auditoría demuestra que cobró de más y tenemos que denunciarlo, porque en neto se llevó 58.000 euros que no le correspondían. Ese dinero que él cobraba es de la parte privada, no de la pública. En el proceso electoral anterior, Viladoms, Julián Martínez y los abogados, hicieron algunas argucias para perpetuarse en el cargo. Estuvieron hasta el 30 de noviembre de 2017, cuando yo tenía que haber accedido a la presidencia el 4 de noviembre de 2016, con lo que consiguieron retrasarlo todo un año. Pidieron la paralización preventiva de las elecciones. Ángel ha vivido este deporte y fue 16 años presidente de la Catalana, pero últimamente lo ha hecho muy mal”.

Sin ánimo de criticar sino simplemente en plan descriptivo, Casado constata las diferencias entre lo que pretende que sea su legislatura y cómo era la anterior: “El primer regalo que me encontré al llegar a la Federación como presidente fue una minuta por valor de 56.000 euros del abogado Luis Sanz, que es el que había montado todo con Viladoms… Ángel era en plan o estabas con él o estabas contra él. Y si estabas en contra iba a por ti. Tenía a todo el mundo acobardado, pero eso ya es agua pasada. Yo informaré de cada cosa que vea y será la Justicia la que tome medidas contra él, no yo”.

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Entre los cambios que ya se aprecian en la nueva era, el federativo destaca que “se ha estructurado toda la Federación en comisiones y se ha conseguido que los ingresos por publicidad pasen de 260.000 a 450.000 euros en el primer año, con los problemas iniciales que ha habido y con los presupuestos ya cerrados”. “Vamos a intentar seguir creciendo para invertir en el deporte. Se ha hecho ya equipo júnior de enduro, para lo que se ha contratado a Iván Cervantes, y vamos a intentar hacer también equipo júnior de motocross. Moreta le dio un salto positivo a la federación, pero debemos darle un aire más moderno”, confirma.

Uno de los grandes desafíos que tiene en mente es la moto de campo, de la que es un apasionado, como demuestra la colección de 215 motos de trial que conserva. El objetivo es que el motero off road no se sienta un delincuente cada vez que sale al campo con su moto, tal como sucede lastimosamente en muchas regiones de España. Este es el plan que presentará mañana: “El jueves (por mañana) se va a presentar en Barcelona un proyecto para hacer sostenible la moto de campo, con tres puntos muy concretos: que las motos cumplan las normas legales de seguros, intermitentes y demás; comportarse bien en el campo, cediendo el paso e incluso parándose cuando se coincida con otras personas en el campo; y crear un volumen de gente que nos dé un peso específico, algo que se conseguirá acumulando usuarios a través de la plataforma ‘motodecamposostenible.com”. Campeones como Marc Coma, Toni Bou, Laia Sanz, Iván Cervantes, Alfredo Gómez y Josep García estarán presentes en las instalaciones del RACC, en Barcelona, a partir de las 12:00, para arropar esta iniciativa, que no será la única… “También queremos presentar una propuesta para modificar la Ley de Montes y, aprovechando que la Ley del Deporte se quiere modificar, a ver si en la nueva se puede favorecer que se ejerza el deporte de la moto”. Si Casado consigue algo así es para nombrarle presidente vitalicio, a lo que responde que “todo eso es por satisfacción personal”.

Hablando de licencias, asegura que “en la actualidad hay unas 15.000 licencias federativas, que está cerca de la mejor época, que fueron las 20.000 del año 2004 o 2005. Este año se ha subido un 15%”. Y explica que “el precio de la licencia es de 485 euros, de los cuales 280 van para el seguro federativo y el resto para la federación territorial. Para la RFME sólo queda de esa cifra entre 10 y 24 euros”.

El deporte femenino, tan en auge en los últimos tiempos, también se cuida en la RFME: “Hay Comisión femenina y hay campeonato femenino en todas las disciplinas, con la posibilidad de que las chicas que lo deseen puedan competir contra los chicos”. Además de Ana Carrasco, el gran ejemplo por antonomasia de lo que pueden hacer las féminas españolas en el motociclismo es Laia Sanz, para la que la RFME ha pedido al Comité Olímpico Español, y ha sido concedida, la Orden de Mérito. Y también para Toni Bou, que la recibirá junto a la dakariana y a la exatleta Ruth Beitia.

De lo que Casado también está muy al tanto es de los nuevos circuitos que puedan surgir por nuestra geografía: “Se está creando el Centro Tecnológico Nokian Tyres en Santa Cruz de la Zarza. Y en Madrid se está moviendo algo, pero aún no puedo decir qué es. Están moviendo la recalificación de unos terrenos y luego salir al mercado para encontrar financiación”. Lo de un circuito en Madrid que coja el relevo del querido Jarama sí que parece misión imposible, pero si Manuel Casado lo dice, igual es posible. Su primer año está resultando impecable y tiene pinta de que lo mejor está por llegar: “Me quedan dos años de mandato, porque volverá a haber elecciones en 2020, y la verdad es que casi todo lo que tenía en mente ya está en marcha. Incluso hemos vuelto a la FIM, donde me dijeron la primera vez que fui que no recordaban cuándo fue la última vez que acudió un federativo de la Española”. Eso ha cambiado, como tantas otras cosas por el bien de la RFME. Que no decaiga y que dure muchos años, porque los nueve títulos mundiales celebrados este año y los que han de llegar, necesitan una Federación sólida.