Dakar: Mini quiere en su buggy a Sainz, Peterhansel y Red Bull
El ‘dos ruedas motrices’ de la marca tendría como patrocinador principal a Red Bull. Toyota también negocia con el campeón madrileño.
Si cuentas con los mejores pilotos de tu parte, quizás ganar el Dakar sea un poco menos complicado. Y con Carlos Sainz y Stéphane Peterhansel sin equipo tras la salida de Peugeot de la competición, ambos son objetivos prioritarios de Mini y Toyota para la próxima edición del raid, que se disputará en Perú en enero de 2019.
En el caso de Mini, marca que compite a través de la escudería X-Raid, hace ya un año decidieron diversificar estrategias y hacer dos apuestas: por un lado el buggy de dos ruedas motrices, más eficaz en terrenos blandos y dunas, y por otro el clásico 4x4 que hace ventajas sobre el piso duro. En el Dakar no ha habido mejor buggy que el de Peugeot, por eso la escuadra de Sven Quandt quiere contar con los pilotos que ganaron con él y fueron clave en su desarrollo: Sainz y Peterhansel. En ese movimiento tendría un papel protagonista Red Bull, que sería el patrocinador principal del coche, según informan fuentes cercanas al equipo.
En el otro Mini, el 4x4, se mantendrán los colores de la bebida energética Monster, habitual anunciante de X-Raid que también apoya a Nani Roma. Con ese todoterreno acudirá al próximo Dakar el piloto catalán, que este mes disputará el Silkway Rally. Es un coche probado y trabajado, "duro, que puede ser muy rápido", dice Roma, frente al buggy aún por desarrollar. Pero el campeón del Dakar en 2004 y 2014 reconoce que en las dunas peruanas "el buggy puede ser mejor opción". Él no lo llevará por varios motivos, también publicitarios. Sobre el interés del equipo en fichar a Sainz y Peterhansel, Nani, que sigue las informaciones desde fuera, afirma: "Los grandes pilotos siempre te hacen mejorar. A Carlos sería mejor tenerlo en casa que fuera, al primero que quieres ganar es a tu compañero. Sería muy bueno para el buggy que viniera".
Pero no hay nada cerrado aún. Sainz, que en febrero reconoció "contactos" con las marcas, ha probado en Marruecos tanto el Mini como el Toyota y sigue negociando con los japoneses. Quiere un vehículo que le permita aspirar a otra corona en 2019. El Hilux fue competitivo este año, aunque con problemas de fiabilidad. El potencial del Mini no se vio por los accidentes. Sobre uno de esos dos coches, la caravana del Dakar espera a su campeón.