MOTO2

Rabat: "Hacer la pole en Jerez es una inyección de moral"

El catalán fue el mejor de la categoría intermedia y para la carrera anuncia espectáculo: "Intentaré disfrutar y que todos lo hagan también en la grada".

Jerez de la Frontera
Román RíosEFE

-Enhorabuena por la pole. ¿Especialmente necesaria por la moral que conlleva?

-Sí, hacer la pole siempre en Jerez es una inyección de moral importantísima. Llevamos un fin de semana muy bueno, trabajando mucho de cara a la carrera, tanto que sólo hemos gastado dos neumáticos y medio en todos los libres, para guardarlo todo para el crono. Normalmente doy muchas vueltas, pero lo que he mejorado es que ahora soy rápido desde la primera. Eso está muy bien. Estoy contento, pero a seguir trabajando.

-¿Cuáles son los problemas que estaba teniendo con la moto?

-En la pretemporada nos llovió siete días y medio de los nueve que hemos tenido, y eso nos dejó con muchas dudas. En Qatar no tenía nada de confianza delante, y por eso me caí intentando pasar a Corsi. No frenaba como tenía que frenar y me lo llevé por delante. En Texas hubo un gran cambio, con un nuevo basculante y empezamos a ver la dirección. Y en Argentina ya nos fue bien en el oficial, pero cometí el error en carrera. Aquí me siento bien, estoy contento y estoy feliz. Intentaré disfrutar de la carrera y que todos disfruten en la grada.

-¿Le alegra que Zarco y Lowes estén más atrás que de costumbre?

-Seguro que en carrera estarán ahí.

-Hace dos años logró aquí su primera victoria y contó que había cambiado sus hábitos de entrenamiento físico, psicológico y hasta su alimentación. ¿Mantiene esa forma de trabajar?

-Antes iba solo y ahora me he dado cuenta de que las carreras son cuerpo a cuerpo, de hecho ahí está la gracia, así que ahora soy más completo, tanto física como mentalmente, con las ideas más claras. Se nota que he crecido y espero seguir haciéndolo.

-¿Cómo se explica que aún no haya habido ninguna victoria española en Moto2 y Moto3?

-Bueno, ha sido un conjunto de cosas. Todo el mundo aprieta mucho. Moto2 es muy difícil y, con una buena puesta a punto y ganas consigues ir rápido, con lo que es difícil marcar la diferencia. Los españoles hemos tenido un poco de mala suerte y ya es hora de que eso empiece a cambiar.

-¿Se sentía más cómodo con la Kalex de 2014 y, en tal caso, le ha pedido al equipo volver a esa moto?

-Depende. De delante… Hemos de trabajar con la moto actual, porque la Kalex 2014 estaba muy bien hecha y era una pasada. Pero siempre se evoluciona y hoy se ha ido más rápido. Hay que seguir trabajando, sobre todo en el tren delantero, cuyos fallos a veces vienen del trasero. Yo nunca pensé en el cambio de moto, porque el equipo quiere ir con la 2015, con lo último, y nunca llegamos a estar tan desesperados como para pensar en el cambio.

-Su jefe, Bartholemy, ha llorado emocionado al verle de nuevo en la pole…

-Eso significa que estoy en un equipo que siente las cosas, que quiere ganar y que, como yo, sólo importa lo deportivo, ganar carreras y ser cada vez mejores. Estoy muy orgulloso de estar en este equipo.

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