Guía The Division 2: consejos básicos para Conflicto

Marzo está siendo la explosión de calidad que todos esperábamos para la primera mitad de año. Tras un Devil May Cry 5 que arrasó en números y el reciente Sekiro: Shadows Die Twice, la nueva obra del maestro Hidetaka Miyazaki, Ubisoft también ha tenido mucho que decir entre estos dos gigantes. The Division 2 es la secuela que todos esperábamos. Nuestro análisis no deja lugar a dudas: es el mejor looter shooter de la generación. Por ello, hoy os traemos los primeros consejos como parte de nuestra guía detallada del proyecto de Massive Entertainment.

Quizá el modo que pasa más desapercibido entre los nuevos jugadores sea Conflicto. Para quienes no estén familiarizados con la oferta de la saga, el último contenido previo pago del título original fue la introducción de un modo PvP competitivo. Dos equipos de cuatro jugadores se medían el todo por el todo en un escenario que recordaba a los mejores third person shooter multijugador. Lo que en su momento era el germen hacia algo más, en 2019 se convertiría en uno de los principales atractivos de esta segunda entrega. Pero, ¿qué encierra entre sus fronteras? A continuación os explicamos cómo entrar y qué consejos útiles debéis seguir en vuestros primeros pasos en él.

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Introducción

El método de desbloqueo de Conflicto está demasiado oculto. De hecho, un servidor se percató de que ya estaba disponible por pura casualidad. Durante el primer trío de misiones principales, uno de los especialistas de la Casa Blanca nos instará a hablarle. Localizado en la parte derecha de la puerta principal, hacerlo nos reportará automáticamente el billete de entrada al modo de juego.

Tenemos dos opciones para acceder a ella, ya sea caminando siempre hacia la tienda de campaña explicada con anterioridad o durante los menús de modo de juego. Pese a que algunos jugadores pueden tener reticencias a la hora de entrar en combate, en absoluto debéis tener miedo; la normalización es el gran triunfo de The Division 2, y su influencia alcanza todas las modalidades con las que disfrutar de la experiencia.

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Ya tengas nivel quince, veinte o cinco, puedes optar a introducirte en conflicto. El matchmaking inicial será friendly con tus estadísticas. Los jugadores de nivel treinta serán emparejados con los de su mismo rango (o al menos quienes tienen ya especialización), mientras que quienes no han llegado todavía al endgame jugarán entre sí.

Como es natural, el poder del equipamiento será estándar entre todos los participantes de la partida. Tan solo variarán las habilidades pasivas de esas piezas. Para decirlo a grosso modo, funciona exactamente igual que el Crisol de Destiny, con la salvedad de que aquí un arma u otra no tiene tanta diferencia con respecto a las legendarias de Bungie.

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Conflicto tiene en estos momentos dos modos de juego: Control y Duelo por Equipos. Ambos son de corte clásico; hablan por sí solas de lo que ofrecen. La única variación radicará en la lucha por las ventajas, cajas que aparecerán aleatoriamente en el mapa y por la que sendos equipos lucharán por controlar. Sus beneficios varían desde más salud, pasando por daño, munición especial, etcétera. A niveles treinta, la mayoría de éstas estarán enfocadas a rellenar los proyectiles de la arma de especialización. Ninguna ventaja será individual; siempre serán colectivas.

Estrategias

Debemos tener en cuenta que pelear dentro del modo Conflicto es radicalmente opuesto a lo que hemos podido vivir en la zona oscura. Allí la traición y la emboscada rápida es el pan de cada de día; no siempre entramos mentalizados de que pelearemos con otros jugadores. Sin embargo, el PvP competitivo tiene más puntos en común con otro TPS rivales de lo que puede parecer. Ante todo, no debemos olvidar que estamos ante un shooter de coberturas, por lo que utilizarlas en la medida de lo posible es clave para sobrevivir. Atrincherarse junto a tus compañeros es fundamental, máxime cuando estamos controlando una posición o defendiendo una vía por la que aparecerán enemigos.

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Las prisas nos empujan sin saberlo a una muerte certera. No somos un tanque, ni lo seremos nunca; mantened distancias seguras con el enemigo y utilizad armamento la máxima cadencia (DPM) posible. Hablamos de rifles de asaltos como FAMAS o F2000; subfusiles nivel Vector. Hacer el mayor daño por segundo es clave. Tened en cuenta que al hacer esto, consumiremos muy rápido el cargador, ahí es donde entra nuestro segundo consejo: escopetas automáticas. Si bien en el modo PVE no son excesivamente útiles como armamento secundario, es en conflicto donde lucen todo su potencial.

Una de las técnicas habituales en este modo es la combinación de las habilidades escudo y dron ofensivo. El primero debe ser la que nos permita disparar con nuestro armamento principal. Pese a que descubrimos las piernas, la movilidad que nos ofrece y la cobertura del tronco mientras tenemos alto poder de fuego es fundamental para poder asfixiar al contrario. Por otra parte, el dron nos seguirá a todas partes, y pese a que está más equilibrado que en la otra cara de The Division 2, su apoyo es bastante útil. Si somos más defensivos, el lanzador de salud aumenta nuestra tasa de supervivencia al no tener que depender de los consumibles de armadura.