Prey (2006) - Abrazo materno

Subí al artilugio y activé la esfera del siguiente modo: primero me acercaba a los láser azulados, y después disparaba contra su base para activarlos. Una vez activos todos, me adentré en el corazón y cerebro de la Esfera, en el punto neurálgico de la pesadilla.

Mi sorpresa fue mayúscula al conocer a La Madre. Había sido humana, y su historia tan familiar para mí me revolvía las tripas… Para acabar con mi enemiga me proyecté y disparé flechas contra todos los cristales de su hogar. Luego usé todo mi potencial bélico para alcanzarla en el interior. Como se suele decir, ¡¡a saco!!

Y en ese momento, después de un buen rato de lucha, me teletransporté a un extraño lugar…

La táctica para acabar de una vez con ella era la siguiente: sólo podía alcanzarla cuando le quitase el campo de energía que la protegía, y para ello era necesario una gran explosión. Activaba los paneles que había dispersos y que liberaban bombas flotantes. Cuando La Madre pasaba cerca de una, disparaba y le quitaba la protección. Entonces atacaba con mis armas con más calibre.

De este modo, llegué al final de la historia… ¿me dejaría corromper por tanto poder?…