Zarandeo a Rahm y Tiger
Día durísimo para ambos en Augusta para firmar una tarjeta de +5 y +6, respectivamente, que entierra sus aspiraciones. Lidera Scheffler con Smith al acecho.
El día que el maestro habría cumplido 65 años, el dios de Augusta quiso que las condiciones fueran exigentes. Viento del norte, mucho frío, greenes variables con bote de bola indescifrable, banderas incomodísimas... nada era fácil en la tercera jornada de la 86ª edición del Masters de Augusta. Día duro para homenajear el recuerdo de Seve Ballesteros que llevó al límite y acabó con las opciones de muchos aspirantes. Entre ellos, nombres muy importantes como los de Jon Rahm, Tiger Woods y Sergio García. El león, el tigre y el niño claudicaron ante el tapiz verde de Georgia con recorridos en las que el color verde prevalecía en sus tarjetas.
El vasco de Barrika firmó una desastrosa ronda de +5 (+7 en el cómputo combinado) con cinco bogeys, un doble bogey y dos birdies; sólo sonrió con un gran putt embocado para ganar al hoyo 18. Puesto 41º para Rahm. Por su parte, el castellonense cerraba el 75% del major con +4 en total tras cuatro bogeys y dos birdies; y el norteamericano con +7 total como Jon tras un +6 debido a los cinco bogeys, dos dobles bogeys y tres birdies. “Estoy cabreado. El barro de nuevo ha hecho que varios buenos golpes hayan acabado en casa dios”, decía el español.
Tras 54 hoyos perdían su aspiración de chaqueta verde, algo que ya habían hecho por ni siquiera pasar el corte otros como Spieth, Koepka, DeChambeau, Schauffele, Rose, Molinari... Augusta pasa factura sin mirar documentos de identidad. La tristeza e incomodidad de la mayoría, una constante cascada de errores que iban estropeando sus números a lo largo del paso de los hoyos tenía, como suele ocurrir, una parte B. La de los elegidos que parecen no sufrir los mismos problemas. Por encima de todos, Scottie Scheffler. El número uno sigue en un estado de forma que asusta y camina firme a ganar su cuarto torneo en los últimos seis disputados... tras no ganar ninguno de los 70 primeros en el PGA Tour.
El portentoso físico (mide 1,91, pesa 91 kilos y calza un 45) del golfista nacido en Ridgewood (New Jersey) hace 25 años le hacía avanzar por el Augusta National como un titán que encadenaba golpes que le abrían muchas opciones de birdie. No sufría, salvo prácticamente en el postrero 18, como el resto de ‘mortales’ para cumplir con los impactos pedidos. Únicamente el australiano Cameron Smith, el peculiar ganador en ‘The Players’ que renunció al Mundial Match Play (que ganó Scheffler) para estar con su madre y su hermana en Australia, parece poder sufragar la desventaja con la que parte a los 18 hoyos finales tras realizar una grandiosa vuelta de 68 impactos (-4). Scheffler lidera con tres golpes de renta sobre el 'aussie'.