Joanna pelea en el alambre

Joanna Jedrzejczyk es, por méritos propios, una de las peleadoras más mediáticas de la UFC. Lo merece porque la polaca, de 32 años, es seis veces campeona del peso paja. Además, sabe venderse muy bien, lo que la ha convertido en referente en su país y en un rostro muy reconocible fuera de él. Cada vez goza de más caché, pero al mismo tiempo le está costando más en el octágono. Namajunas la noqueó en una asalto en 2017, después la volvió a derrotar, esta vez a los puntos, en 2018. Decidió pasar al peso mosca. Ganó en su debut y perdió ante Valentina Shevchenko, lo que la hizo retornar al paja. Tras muchos rumores sobre si cumpliría con el límite lo hizo, ganó y apuntó al título.

Así, pese a haber perdido tres de sus últimas cinco peleas (las derrotas, todas titulares) vuelve a tener la ocasión de ser campeona. Lo hace este sábado en el UFC 248, en el que desafía a mujer que ocupa el trono que un día tuvo, Weili Zhang. La china es la nueva sensación de la división. Noqueó a Jessica Andrade refrendando una gran racha (lleva 20 victorias seguidas). Sin duda es una rival exigente, pero Joanna está confiada y cree que tiene todo bajo control. "Va a ser muy peligrosa en el primer round. Va a ir encima a soltar golpes. Es muy fuerte y puede noquear, por lo que necesite ser cautelosa e inteligente. No tengo que probar nada a nadie, pero quiero dejar claro que soy una de las mejores de todos los tiempos”, aseguró en la previa.

La confianza de Jedrzejczyk en sí misma es una de sus señas de identidad y antes e este pelito ha revelado porqué la tiene. El camino de su rival le parece sencillo. "Creo que Andrade no estaba en su mejor nivel cuando se enfrentó a ella. Lo escuché de su campamento. Tuvieron muchos problemas con el corte de peso y la rehidratación no fue adecuada. Fue una Jessica Andrade totalmente diferente. Pese a ello, Zhang es una campeona, pero todavía no se ha enfrentado a alguien como yo", añadió Joanna.

La polaca viene de una mala racha y otro tropiezo la alejaría de los títulos durante un tiempo, además pondría su carrera entre interrogantes. Entre confianza y dinámica, los fans se quedan con el segundo factor. Por ello, la campeona parte como favorita. Si presiona y cruza golpes como acostumbra tiene mucho ganado. Joanna cuenta con una importante quijada y está más experimentada en peleas largas, en las que se desenvuelve muy bien. Si logra minimizar los golpeos de la china ganará enteros. Son dos campeonas, pero diferentes. Una tiene trono, otra juega en el alambre y sin red.