Factor Courtois

Fue acabar el primer partido de Champions de la edición 2021-22 ante el Inter cuando un grupo de jugadores fueron a felicitar a Thibaut Courtois (Bree, 29 años). El portero belga había fraguado la victoria de los blancos. Sobre todo, en la primera parte, donde tuvo que hacer frente a los ataques del conjunto interista con un repertorio de paradas y reflejos. Su actuación propició que el gol que había marcado Rodrygo a falta de escasos minutos para el final del encuentro sirviese para que los blancos comenzasen de manera solvente una nueva edición de la competición europea.

Pero más allá de ese abrazo felicitador, sobresale una estadística curiosa y llamativa: una vez producida la marcha de Keylor, el meta belga ha jugado 26 encuentros de Champions con el conjunto blanco. Ha dejado su meta a cero en nueve ocasiones (el 34,61%). De esas nueve porterías a cero, siete han sido lejos del estadio madridista (el 77,78%), ya fuese el Santiago Bernabéu o el Alfredo Di Stéfano. En el primero sólo el Galatasaray se fue sin marcar (6-0 en la campaña 2019-20). En el estadio de Valdebebas, únicamente el Borussia Mönchengladbach se fue de vacío (gracias en parte a la actuación del espigado meta belga).

Sin embargo, lejos de la capital española, el portero se agiganta: de 13 salidas, sólo ha encajado goles en seis, dejando a cero el resto. Ajax, PSG, City, Borussia, Shakhtar y Chelsea, su exequipo, han logrado batirle. Equipos como Viktoria Plzen, Roma, Galatasaray (donde una exhibición suya evitó una debacle blanca), Atalanta, Liverpool e Inter (en dos ocasiones) no pudieron batirle, dejando grandes imágenes de su calidad.

Ante el Shakhtar, Courtois debe volver a ser el de las grandes noches de Champions. El conjunto ucraniano fue el equipo que más goles logró marcarle la temporada pasada, con cinco, tres de ellos en el Di Stéfano. Sin embargo, luego se disparó, siendo uno de los pilares en el Madrid de Zidane, que estuvo cerca de alcanzar la final de la Champions. Ante el conjunto minero, y en un partido que se traduce en un encuentro clave para las aspiraciones madridistas en la máxima competición europea, su figura debe elevarse otra vez.