TENERIFE

Ramis tiene números de ascenso

El técnico del Tenerife llegó en la jornada 14 con el equipo contra las cuerdas. Ahora, va al alza. Desde que aterrizó en la isla, el equipo compite con los mejores.

Juan Garcia CruzDIARIO AS

El Tenerife navegaba en aguas agitadas en el primer tramo de temporada. No funcionaba en ataque y los resultados no llegaban. Tanto que el descenso acechaba y la dirección tomó la decisión de cambiar el rumbo. En ese giro de timón llegó Luis Miguel Ramis. El tiempo ha demostrado que no solo fue un acierto, sino que incluso un movimiento más temprano podría haber situado al equipo en posiciones de nobleza. A día de hoy, es más, ya ni siquiera se descarta. Eso sí, deberá haber plena constancia, ya que la sexta plaza está protegida por el Rayo Vallecano con 46 puntos en su casillero, una puntuación francamente elogiable.

Las estadísticas hablan por sí solas. Tras la conclusión de la jornada 13, el Tenerife era 17º con solo ocho goles a favor y dos puntos de margen para con el descenso. A día de hoy, ocupa una cómoda décima posición con 39 en su haber y la zona de peligro a un margen de diez puntos. Por supuesto, ya está más cerca de lograr la clasificación para el Playoff, que está a siete de distancia. Pero, ¿qué ha cambiado en este Tenerife para un contraste tan señalado entre ambas etapas?

Ramis suma ocho victorias y dos empates tras 16 partidos al cargo. En este período, es el sexto mejor equipo de la competición, por detrás de los grandes que ya se marcaron como objetivo jugar en Primera División la próxima temporada. El Mallorca es el líder desde que llegó el nuevo técnico al Tenerife con 34 sobresalientes puntos. Por detrás llegan Almería, Espanyol, Leganés y Sporting. Y justo después el conjunto isleño. Si hubiera sumado un triunfo más, solo sería superado por el mencionado Mallorca. Ramis está en números de ascenso, cuando antes se temía por el descenso. Una revolución en el Heliodoro Rodríguez López.

Superhéroes

A pesar de la evidente mejora en juego y resultados, el técnico prefiere mantener la calma. El pasado 22 de enero, Ramis habló en la previa del partido contra el Lugo de la euforia que se había generado tras una buena racha de resultados. Su metodología de trabajo es el día a día y no quería excesos que perjudicaran la buena dinámica. Por eso fue tajante: "Espero que no pensemos que los últimos partidos nos han dado súper poderes para ganar de forma sencilla". El Anxo Carro mostró la exigencia de la competición y el Tenerife cayó por dos goles a cero.

Otro de los mensajes claros que transmite el técnico es la constancia y el equilibrio dentro de un vestuario. Si antes del partido no eran superhéroes, después tampoco serían supervillanos. De aquella derrota, el equipo se sobrepuso con un empate ante el siempre combativo Fuenlabrada y dos triunfos de quilates ante dos aspirantes como Rayo Vallecano y Ponferradina. El truco no pasa por ganar siempre, sino en no bajar la tensión ante la adversidad.

La plantilla cree en el proceso

Ramis definió su estilo como uno que le da "mucha importancia al orden colectivo y a que el oponente no haga daño, haciéndote difícil de superar". Para ello, busca en su plantilla una complicidad total, formar un bloque inexpugnable, que crea en su idea y que vaya de su mano hasta el final. Desde luego, los resultados no engañan. La idea ha calado y los jugadores la ven como el mejor camino para hacer grandes cosas.

Por si quedaba alguna duda, Pomares concedió una entrevista a AS en la que reafirmó la hipótesis anterior: la plantilla va a muerte con Ramis. Así lo definió: "Él transmite una idea y cuando esa idea llega a todos y todos se la creen, es mucho más fácil de llevarla en el campo y que dé resultados. Hay veces que no se coge la idea o ese entrenador no la transmite dependiendo de muchos factores. Pero en este caso, Ramis ha dado con la tecla y ojalá continúe así para seguir sacando puntos".

Pese a ello, el entrenador se mantiene en una línea inamovible: "A día de hoy, no somos candidatos a nada". No le falta razón, pero la situación ha dado un vuelco. El Tenerife, que temía por el descenso, ya sueña con dar la campanada y colarse entre los mejores. Día a día, partido a partido, gol a gol, y portería a cero a portería a cero. Ahora llega el Málaga y después el siempre apetecible derbi canario. Con dos triunfos, el club prácticamente garantizaría la continuidad en Segunda, con aún muchas jornadas por jugarse. Marca Ramis,

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