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VALENCIA

Las cuatro incógnitas que condicionarán el Valencia 20-21

La confección de la plantilla del próximo curso dependerá de los casos que, por distintos motivos, no tienen asegurada su estancia en el club: Cillessen, Garay, Ferran y Rodrigo.

Rodrigo, Garay, Ferran y Coquelin.
ALBERTO IRANZO

Con el final de la temporada 2019-20 en el aire, en los despachos del Valencia ya piensan en la confección de la plantilla de la próxima campaña. Y ahí surgen cuatro dudas, una por línea, que condicionan la confección de la misma. A partir de ahí habrá que retocar algunas posiciones. Pero de cómo se solucionen esas cuatro incógnitas dependerá el grueso de la plantilla del próximo curso.

Cillessen

En la portería la duda es Cillessen. Jaume seguirá siendo uno de los porteros pero el otro puesto no es seguro que sea para el portero holandés. Por un lado, Cillessen tiene una nómina muy alta que sería difícil de pagar si no hay Europa. El Valencia está ahora mismo fuera de Europa y el final de Liga no está asegurado. Además, no ha convencido este año y en los despachos de Mestalla se plantean traspasarle y fichar otro portero. En un mercado imprevisible como será el próximo, no será fácil.

Garay

En defensa, la renovación de Garay sigue sin producirse. Estaba apalabrada antes de irse Mateu Alemany pero todo se paró tras su marcha. Después, el club filtró que estaba muy cerca pero no firmada. E incluso cuando se lesionó, el Valencia deslizó que mantenía su propuesta de renovación. Tres meses después no se ha llevado a cabo y está lejos de producirse. Si no llega esa renovación, el Valencia deberá hacerse con un central con galones. Con Paulista como central consolidado, el Valencia necesitará otro central ya hecho y con rendimiento inmediato para que asuma la titularidad en el centro de la zaga.

Ferran Torres

El quid de la cuestión. ¿Tratar de renovarle o sacar una buena tajada para un futbolista que acaba contrato en 2021 y en enero puede negociar con cualquier club? Lo que ahora mismo pretende el Valencia es convencerle para que firme un contrato largo y se quede como jugador franquicia. Es la opción A y ahora mismo no se piensa en otra cosa. Pero si el tema se enroca, otra posibilidad es que Peter Lim cambie de estrategia y se vea obligado a aceptar una buena cantidad de dinero, en este verano, por una de las perlas de Europa. En ese sentido, la composición de la plantilla tendría que cambiar. Se necesitaría desequilibrio (Silva es una posibilidad que ilusiona), no necesariamente por banda derecha porque ahí ya juega Carlos Soler pero sí un futbolista que supere líneas como es el caso de Ferran.

Rodrigo

Peter Lim sigue con la idea de vender a Rodrigo. A sus 29 años, al dueño del Valencia se le acaban las oportunidades de sacar rédito a la inversión que hizo en su día (30 millones) cuando lo compró al Benfica. Tanto el verano pasado (Atlético) como en enero (Barcelona) el hispano-brasileño estuvo cerca de abandonar Mestalla. Sin embargo, ninguno de los dos interesados llegó a la cantidad que solicitaba el singapurense, 60 millones. El caso es que en el próximo mercado, sea cuando sea, Rodrigo va a volver a estar en él. Aunque la peculiaridad del mismo, tras la crisis del Covid-19, podría hacerle a Lim reformular sus peticiones.