Tebas: “Lucho por el fútbol, no por ver a Villar en la cárcel”
Tebas pasa revista a varios temas: su relación con Madrid y Barça, las elecciones a la Federación, la final de Copa, Cataluña y el artículo 155…
Una vez que analizó sus planes y los de la patronal en la primera parte de esta entrevista (“No descarto seguir en LaLiga tras 2020”), hablemos de otros temas y nombres propios. ¿Habrá nuevos horarios?
Vamos a seguir con los mismos en líneas generales. Han funcionado muy bien. Dije que nos iban a copiar y ya nos están copiando otras ligas. En Italia ya hay seis bandas horarias y si yo hubiera ido allí, porque así lo acordé, hubieran tenido ya diez.
¿Está más cerca ahora de convencer al Real Madrid para que tenga un equipo femenino?
No obligaré a nadie. Es por voluntad. No les presionaré. Lo que sí digo es que la Liga Iberdrola está cada vez más arriba.
¿Cómo están los asuntos judiciales con el Madrid? Se enfrentaron en los tribunales por el reglamento audiovisual.
Enfrentamiento me parece duro. Hay diferencias de interpretación y seguimos en los tribunales. Vamos ganando las medidas cautelares que solicitaban. Quedan decisiones importantes y definitivas. No pasa nada por ir a los tribunales. Se lo dice un abogado. Por eso no cambian las relaciones.
Lo que tampoco cambian son las polémicas arbitrales. ¿Se acabarán por fin con el VAR?
No, pero van a disminuir.
La gran pregunta: ¿hubiera pitado penalti a Lucas?
Sí.
¿Le gustaría que el arbitraje dependiera de LaLiga?
No. Sí es cierto que se plantea muchas veces y que lo hablan los clubes. No lo veo esencial. Ya lo hemos hablado muchas veces con Victoriano Sánchez Arminio. Lo que hay que resolver es la relación laboral de los árbitros con su Federación y también hay que ver qué hacen y cómo están cuando se retiran. Hay que ayudarles.
¿Se lleva mejor con Arminio?
En algunos momentos podemos estar más o menos enfadados, pero las relaciones institucionales siempre han sido buenas. Victoriano ha sido muy leal a Villar y, aun así, a nivel institucional siempre hubo relación. No confundamos buena relación con claridad de las relaciones.
Otra batalla. La suya con el control económico ha llegado a internacionalizarse. ¿Qué haría exactamente con el PSG?
Debería ser excluido de la competición. Los controles a posteriori no me gustan. El daño ya lo ha hecho. Eliminó a clubes. Seguiremos peleando, nos hagan caso o no. Son patrocinios inflados que no son de recibo.
Con tanto dinero el PSG se llevó a Neymar este verano. ¿Ve factible que regrese a España?
Ni idea. Pregúnteselo a los clubes que pueden firmar a un jugador de ese nivel.
¿Y Guardiola? ¿Le gustaría?
Sí, claro.
Me da lo mismo. Son decisiones de él. Es una estrella. El sectarismo es cuando no aceptas a alguien que es bueno en su profesión por su forma de pensar. Yo nunca he sido sectario. Es extraordinario y me gustaría que estuviera aquí sí o sí.
Será difícil sacarlos de donde están. Los clubes tienen ya un poderío económico muy grande. ¿Podremos ver a clubes españoles incluso salir a Bolsa?
Ya ha habido interés de alguno. Lo harán pequeños y medianos. Habrá alguno en dos años.
Por cierto: ¿cuánto deben los clubes españoles a Hacienda?
El fútbol profesional poco más de 50 millones (en 2011 eran 752). No lo podemos devolver ahora mismo porque están aplazados por los Concursos.
Con lo que más se alarmó España fue con el Caso Soule. ¿Es un triunfo suyo y de Cardenal?
No. Es un fracaso del fútbol.
¿Cómo vivió el encarcelamiento en julio de Villar?
Con tristeza. Me pilló volviendo de China. No he luchado por ver a Villar en la cárcel. Luché y lucho por que el fútbol tenga transparencia y libertad y no haya nepotismo y clientelismo.
Como abogado, ¿cree que condenarán a Villar?
No sé qué pasará. Creo que habrá algunas condenas.
Usted también ha tenido problemas, pero con Hacienda.
Siempre tengo roces.
¿En qué punto está aquella querella que le puso la directora de Recaudación de Hacienda por su encendida defensa de los clubes profesionales?
Sigo peleando por lo que ha sido un atropello hacia mi persona por parte de la Agencia Tributaria. Es un contencioso largo que me está costando muchas canas y peleas. Llegaré a acreditar que el mundo de las casualidades no existe.
El Confidencial publicó hace meses que Hacienda le había embargado 4,7 millones por su gestión con el G-35. ¿Cree que esta investigación surge de aquellos problemas que tuvo con dicha directora?
No tengo la menor duda de que ha sido así. Se han seguido criterios interpretativos que no son los habituales. Llegará el día en que esta situación la haré pública y contaré lo que ha pasado. Que la justicia investigue y actúe. No olvidemos que hablamos de una persona que en Navidad mandó a tomar por saco a muchos funcionarios de Hacienda a través de un correo electrónico.
Vayamos al fútbol más puro. ¿Irá a la final de Copa?
Creo que no puedo. Tengo un tema familiar.
Hace poco no era ni invitado. ¿Esta vez sí lo ha sido?
Yo me imagino que sí. He sido abuelo y tengo obligaciones familiares. Si pudiera, acudiría.
Usted reconoció en As que era madridista. ¿Querrá por tanto que gane el Sevilla?
No. Ser madridista no significa ir contra el Barça. Mi hermano mayor siempre ha sido del Barça. Me da igual el ganador.
Con el Barça también tuvo tensiones. El último episodio fue por lo que dijo de aplicar el 155 en la final. ¿Se arrepiente?
No. Aquellas manifestaciones eran en tono jocoso. Me parece muy mal que se pite el himno, igual que LaLiga denuncia lo de ‘puta Cataluña o puta España’. La Copa no es competencia nuestra y había que articular una norma para que no ocurra.
¿Pero su ausencia en el Wanda no se deberá a que no tenga ganas de escuchar cómo probablemente se pita el himno?
No, pero no me apetece ver cómo se pita el himno. Por desgracia tengo que ver muchas cosas que no me apetecen. No es por eso. Al revés: lo que me apetece es oír el himno.
¿Sigue latente el temor a que los clubes catalanes se vayan de LaLiga?
No lo veía posible antes, legalmente y en mi caso sentimentalmente (tiene familia catalana), pero hoy lo veo mucho más imposible porque el Estado de Derecho ha actuado como no quedaba más remedio.
¿Se arrepiente alguna vez de las declaraciones que hace y resuenan?
Diferencio dos cuestiones. Está el efecto mediático. A veces digo, ‘j… qué barbaridad’. Pero cuando me siento a meditar no me arrepiento. Prefiero defender lo que es mi forma de ver la vida, mi libertad, que guardármela porque piense lo que va a pasar.
¿En algún momento los clubes o sus asesores le han pedido que sea más prudente como presidente de LaLiga?
Todos los días me piden que sea más prudente. Ya saben lo que hay. Qué le voy a hacer.
¿No es peligroso que diga públicamente, por ejemplo, que quiere que suba el Huesca?
No. Sería peligroso si estuviera en mis manos conseguir ese objetivo. Si fuera el presidente del Comité Técnico de Árbitros no lo diría. Si fuera presidente de la Federación, no lo diría tampoco, porque bajo su amparo está el arbitraje. ¿Qué capacidad tengo para que el Huesca suba? Siendo presidente de LaLiga el Huesca bajó a Segunda B.
Ahora que saca el tema de la Federación. ¿Cómo ha podido cambiar tanto su relación?
Al cambiar las personas también cambian las cosas.
Ha habido épocas en las que el dinero que LaLiga da a la FEF para el fútbol aficionado (14 millones) ha estado bloqueado y ahora se paga puntualmente…
No, no. Siempre se ha pagado puntualmente sin ningún problema. El pago que se retuvo durante 40 días fue a raíz del Caso Soule en julio. Fue por prudencia. La gente que dirigía la Federación entonces y su ámbito económico estaban en prisión.
LaLiga ha puesto más empeño que la FEF en temas como los amaños. ¿Se siente contento por ayudar a destaparlos como en la Operación Pizarro o triste porque aún existan?
Contento no estoy. Ojalá no hubiera Operación Pizarro. Hay que cambiar la estrategia que ha seguido la Federación en esas categorías. Podemos aportarles mucho.
¿Habrá condenas por el Levante-Zaragoza de 2011?
Debe haberlas. Hemos hecho un escrito de acusación. Participaron jugadores. El auto es claro: hay delito.
Larrea dijo que un representante de LaLiga estará en la Junta FEF si gana. ¿Será usted?
No. Él es el que tiene que decidirlo. Creen que me veo con Larrea 18 veces al día y si junto todas las horas que hemos hablado serán tres y media. Larrea estuvo con Villar 26 años, pero su forma de trabajar no es Villarismo. Rubiales estuvo menos tiempo y por lo que le leo, todo confrontación, sus formas son las del Villarismo. Continuismo. El Villarismo era ‘no a LaLiga porque está Tebas’ y con él sería ‘no a LaLiga porque Tebas quiere el monopolio’. No me podría comprometer en la FEF como me gustaría. Viajo tres semanas al mes. Que decida Larrea quién va de LaLiga. Es libre.
Eso, si gana las elecciones. ¿Qué pasará el 17 de mayo?
Ganará Larrea. No doy opciones a Luis Rubiales. No lo hará por paliza, como dice el otro. Eso es una operación de márketing. Hay que reconocer que está bastante igualado.
Usted comenzó apoyando en este proceso a Jorge Pérez. ¿Se equivocó?
No. Hay que analizar el momento en el que se toman las decisiones. Le di mi apoyo porque creía en el cambio desde dentro de la Federación.
¿Se plantea que Jorge Pérez trabaje para LaLiga como otros miembros de esa candidatura?
No. Ni nunca se lo prometí. Lo digo para que no haya dudas.
La sensación es que apoyaría a cualquiera contra Rubiales.
Hombre, primero habría que ver quién es el otro. Rubiales tiene un hándicap muy importante para el fútbol profesional. Lideró una huelga en 2015 que nos pudo llevar al abismo, estando ya en el precipicio, si no lo llega a parar la Audiencia. Todo fue por una estrategia con Villar, porque lo del 0,5% estaba resuelto. Casi nos lleva a la ruina.
AFE no era sólo Rubiales. Junto a él también negociaban otros que ahora están en LaLiga como Luis Gil.
Pero Luis Gil no estaba presidiendo. El que lideró aquello e hizo la rueda de prensa famosa con los jugadores fue Rubiales. Le tiene que preguntar a Luis si ha cambiado de opinión y si piensa si el control económico ha sido positivo o si ha comentado en privado que aquello pudo ser un error. No desvelaré nada. Me acuerdo perfectamente de todo.
¿Apoyará a La Roja en Rusia o dependerá del presidente?
Si puedo iré. Si cierro reuniones de trabajo. Si no, para ir al palco y a la comida, no viajo.
¿Ve a la Selección capaz de ganar el próximo Mundial?
Claro.