Fnatic ha superado todas las barreras de la improbabilidad para brindarnos una de las jornadas más memorables de la historia de League of Legends, marcándose una épica remontada que los ha llevado desde el fondo del grupo B a conseguir un hueco para los cuartos de final en los Mundiales.
Un equipo roto y fragmentado, pero que sabía que era ahora o nunca, que no podían darse por vencidos a pesar de los terribles resultados de la semana pasada. Y han demostrado que se puede, que Europa no está muerta y tiene cosas que decir.
Y eso depsués de una primera derrota frente al otro clasificado, el poderoso Longzhu Gaming. Fnatic luchó con garras y dientes, pero no fue suficiente para evitar el 3-0 del equipo coreano. Y aquí empieza lo bueno.
Al quedar Longzhu invicto, forzó un empate a tres bandas por el segundo puesto, permitiendo a Fnatic la redención. Un privilegio que necesitaban aprovechar. Y la esperanza hizo el resto.
El mejor día de Fnatic
Llegó Immortals, posiblemente muy seguros de su victoria, para acabar encontrándose con un mortífero Broxah y una alineación que ya nada tenía que ver con los primeros encuentros. Un partido muy igualado pero que decayó por parte de Immortals después de un error garrafal de Cody Sun. A Fnatic le costaría la victoria, pero la consiguió.
Y luego volvió, esta vez contra Gigabyte. Broxah volvió a desmarcarse como pieza fundamental, arrasando con Rek'Sai, pero muy ayudado también por el Cho'Gath de sOAZ. También el Twitch de Rekkles consiguió llevar el partido a una ventaja que nadie esperaría hace tan solo unos días, estompeando a los Marines para cerrar una partida colosal.
Immortals ya estaba avisada, y en la siguiente partida no podían andarse con tonterías. Fnatic se lució de nuevo en una racha espectacular, con Caps y sOAZ perfectamente compenetrados, todo el equipo ayudando y una composición muchísimo más efectiva.
Así llegaron a la partida decisiva contra los Marines. llegando al primer triple empate de los Mundiales de League of Legends, y nadie podía creérselo. La moral de los europeos estaba ya por las nubes y no podían fallar ahora. Y no lo hicieron.
Noway podría haberles fastidiado la partida de sus vidas, si no hubiese sido por sOAZ, que supo parar los pies a la Tristana de Noway antes de que fuera imparable. Y a pesar de todo el esfuerzo de Gigabytes, el orgullo de Fnatic se impuso y logró la tan ansiada posibilidad de seguir luchando.