El aumento de los contagios por coronavirus y la sensación de descontrol en todo el continente para parar la pandemia han obligado a la Comisión Europea a reaccionar a nivel continental este lunes. Su propuesta, aislar las zonas con una incidencia acumulada de más de 500 casos por cada 100.000 habitantes en 14 días.

Esto supondría una restricción total de la libertad de movimiento en gran parte de Europa, y se espera que esta petición o recomendación se aplique en los Estados miembros en cuestión de horas o días. En España, esto afectaría la gran mayoría de comunidades españolas, ya que superan el límite fijado.

La única razón para poder viajar sería una causa excepcional. De momento, la recomendación vigente, que es la que se realizó el pasado mes de octubre, establecía un confinamiento para aquellos que superasen los 150 casos, de manera que es un incremento considerable. El motivo está claro, un aumento de casos provocado también por las nuevas cepas.

¿Cómo afecta a España?

En nuestro país, con los últimos datos anunciados por el Ministerio de Sanidad, pocas comunidades podrían quedarse fuera de esta restricción, ya que una gran parte supera esos 500 casos de incidencia acumulada. Solo Canarias, Asturias, Cantabria, País Vasco y Navarra no estarían confinadas y podrían seguir viajando.

Los residentes del resto de zonas no podrían desplazarse desde allí al resto de Europa, y de la misma manera tampoco se pueden recibir viajeros mientras el umbral fijado siga estando superado.

La media española de la incidencia es de 800 casos, y hay comunidades que duplican o triplican la cifra de los 500. Por ejemplo, Extremadura tiene una incidencia de 1.448 casos, y le siguen Murcia (1.332), Comunidad Valenciana (1.245), Castilla y León (1.215), La Rioja (1.208) y Castilla-La Mancha (1.158).

Así es el texto propuesto por la Unión Europea

“Los Estados miembros deberán disuadir con fuerza los viajes no esenciales desde y hacia las áreas clasificadas como rojo oscuro”, siendo este color el utilizado para una nueva categoría creada y que identifica a las zonas que superen los 500 casos de incidencia acumulada en 14 días.

“Las normas pueden variar, pero la principal recomendación en esas zonas es la de no viajar”, ha explicado Ylva Johansson, la comisaria europea de Interior, en rueda de prensa. Los Estados miembros deberían facilitar a los viajeros recibidos la posibilidad de hacerse un test, además de la cuarentena que tendría que cumplir.

En cuanto a las excepciones manejadas dentro de ese carácter esencial, se permitiría el transporte de mercancías y los servicios esenciales realizados por trabajadores transfronterizos. Para la primera, se ha planificado dejar un sistema de carriles abiertos en las fronteras.

Además, la Comisión considera que los estados afectados deberían adoptar, mantener o reforzar intervenciones no farmacéuticas, que incluiría quedarse en casa o el cierre de algunas empresas de manera temporal.