El jamón ibérico es uno de los mayores activos que tiene España. Nuestro país exporta jamones a prácticamente todo el mundo. Este producto es altamente reconocido fuera de nuestras fronteras y son muchas las empresas que venden a Alemania, Francia, Reino Unido e incluso a China o Estados Unidos. El mercado exterior aprecia la calidad de un jamón de primera calidad.

El jamón ibérico de primera calidad proviene de cerdos ibéricos que pasan los últimos meses de su vida comiendo bellota en la dehesa española, en un paisaje idílico rodeados de robles maduros. Tras un proceso de curación de al menos 36 meses, la carne deja un rastro graso y la bellota que han comido los cerdos hace que el jamón tenga un sabor apreciado en todos los rincones del mundo.

España aprovecha al máximo esa gran demanda mundial de jamón ibérico que existe, pero ahora le ha salido un duro competidor. Concretamente de uno de los países más poderosos del mundo, que no es otro que Estados Unidos. Dos empresas han decidido importar no jamones, sino cerdos ibéricos para ser ellos mismos los que produzcan el jamón, tal y como publica The Guardian. Dos empresas establecidas en Texas, formada por dos españoles, y otra hispanoamericana en el estado de Georgia, pretenden crear su propia versión de jamón.

Esos cerdos no se alimentarán de bellota

Sin embargo, habrá diferencias. Y notables. Contrariamente a lo que sucede en la dehesa española, el cerdo no se alimentará en sus últimos meses de bellota, sino que lo hará de nueces, cacahuetes y semillas de girasol. Los expertos en la producción del jamón ibérico de bellota explican que no será lo mismo en absoluto, porque las bellotas son esenciales para que la carne sea tan deliciosa y desprenda esa grasa que queda entre las manos al comer este manjar tan preciado.

Estos mismos expertos señalan a las autoridades españoles por no proteger la producción de uno de los productos españoles más preciados en el mundo. Creen que en España se debería preservar una industria que está a la cabeza de las exportaciones, un jamón ibérico que es uno de los buques insignia de nuestro país y que apuntan debería ser salvaguardado como Francia hace con el champán.

Además, añaden que no se debería permitir la exportación de cerdos nativos a Estados Unidos ni a ningún lugar, porque avisa de los peligros que pueden ocasionarse y no son otros que otros países latinoamericanos o asiáticos hagan lo mismo y también importen esos cerdos ibéricos y produzcan su propio jamón.

Sea como fuere, España seguirá a la cabeza de la producción de un delicioso producto apreciado en todo el mundo. Y es que mucho tendrán que trabajar en otros países para acercarse a lo que es un jamón que sale de las dehesas españolas.