Si bien el coronavirus ha acabado con miles y miles de vidas, lo mismo ha hecho con los trabajos durante los meses más duros de la pandemia, dejando en España una disminución de la cifra de ocupación en 1.074.000, la peor de un segundo trimestre desde el año 2012.

En los meses de abril-junio, se disparó la tasa de paro al 15,3%, según se ha publicado en la Encuesta de Población Activa (EPA). El desempleo subió en 55.000 personas, es decir, 1,6% más que en el trimestre anterior.

La ocupación disminuyó en 1.074.000 puestos de trabajo (un 5,4% menos que en enero-marzo), con motivo del impacto de la crisis sanitaria y del estado de alarma por la situación de la COVID-19.

En el año 2012, cuando se registró la peor cifra de desempleo en un segundo trimestre, los datos subieron a 63.100, es decir, 8.100 personas más que en los meses de marzo-junio de 2020. Por otro lado, el descenso de la ocupación ha superado todas las referencias de la crisis de 2008.

Los ERTE no se incluyen

El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha recordado que dentro de estas cifras de desempleo no se incluyen los ERTE, ya que la metodología EPA los considera ocupados mientras dicha suspensión sea inferior a tres meses.