El mayor mercado mayorista de Pekín, el de Xinfadi, se ha convertido en un importante foco de contagios de coronavirus. Las autoridades chinas han contabilizado entre el jueves y el viernes 46 casos nuevos entre trabajadores y personas que habían pasado por ese centro, todos los de transmisión local registrados en ese lapso de tiempo en el país.

Para cortar posibles cadenas de transmisión, todo el personal de este mercado ubicado en el distrito de Fengtai, que comprende cerca de 10.000 personas entre empleados, propietarios y asistentes y ocupa 20.000 metros cuadrados (unas 112 hectáreas), tendrán que someterse a una prueba diagnóstica.

De momento han sido testados 1.940 individuos según el subdirector del centro municipal de Control y Prevención de Enfermedades, Pang Xinghuo. Los 46 casos se han mostrado asintomáticos. Ahora se establecerán una serie de puntos especiale spara la venta de productos, lo que evitará clausurar por completo unas instalaciones que proveen cerca del 90% de las verduras y otros productos del campo que consume la capital de China.

Los alumnos no volverán a las aulas

Entre otras medidas de precaución tomadas, se ha establecido que los alumnos que tenían previsto volver a las aulas este lunes, los de edades comprendidas entre los 6 y los 8 años, no lo harán por ahora. Nueve centros escolares que se ubican cerca del mercado han sido cerrados y se ha confinado a 11 complejos residenciales de la zona. Los 46 positivos quedarán en cuarentena mientras las autoridades sanitarias controlan a todos los contactos que hayan podido tener.

Esto significa un paso atrás en la desescalada de Pekín, que había rebajado su nivel de alerta sanitaria recientemente. Hasta ahora, China ha detectado oficialmente 83.075 casos de coronavirus y 4.634 muertos por la COVID-19.