El Tribunal Federal Supremo brasileño (STF) ha ordenado al Ministerio de Salud del país que vuelva a informar de la cifra acumulada de contagiados, muertos y recuperados por el coronavirus. Esta decisión judicial llega días después de que el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, cambiase el sistema con el que ofrecía los datos de contagios del COVID-19 e informase solamente de las cifras de las últimas 24 horas. Ello provocó que varios políticos y medios de comunicación acusasen al presidente de querer ocultar la dimensión real de la pandemia en el país.

“Ordeno al ministro de Salud que mantenga, en su integridad, la divulgación diaria de los datos epidemiológicos relativos a la pandemia de COVID-19, incluso en la web del Ministerio de Salud y con las cifras de casos acumulados, exactamente de la misma manera que lo había realizado hasta el 4 de junio”, reza la sentencia dictada por el juez del STF Alexandre de Moraes, que obliga a Bolsonaro a dar marcha atrás.

Después de que las muertes por el virus superasen el millar durante cuatro días seguidos, el Ministerio de Salud dejó de informar de los datos acumulados, e hizo hincapié en los recuperados. También se cambió la hora en la que se hacía público el parte de salud, que se daba por la tarde y que pasó a conocerse después de los informativos de máxima audiencia.

Para contrarrestarlo, medios de comunicación y organizaciones civiles, así como el Consejo Nacional de Secretarios de Salud, que reúne a los representantes de los 27 estados brasileños, se unieron para divulgar diariamente los datos que no ofrecía el Gobierno. Tras la decisión judicial, el Ejecutivo brasileño anunció que volverá a informar de los datos acumulados, aunque aplicará una nueva metodología y utilizará dos plataformas web, una que informará de los decesos notificados en las últimas 24 horas, y otra, que publicará la fecha exacta en la que se produjeron las muertes.

Brasil sigue siendo uno de los países que más ha sufrido el coronavirus. Según los datos de la Universidad Johns Hopkins, el país sudamericano es el segundo del mundo en número de contagios, tras Estados Unidos, con 707.412 casos, y el tercero en número de muertos, después de Estados Unidos y Reino Unido, con 38.497 fallecidos, 1.272 más que el día anterior.