CORONAVIRUS

¿Cuándo se podrá ir a la playa? ¿Y de copas a una discoteca?

Las cuatro fases de la desescalada incluyen aperturas en todos los sectores, aunque no al mismo nivel. Analizamos algunas de ellas.

Gente jugando al volley en el Líbano.
REUTERS

La desescalada anunciada por Pedro Sánchez, que consta de cuatro fases, da el pistoletazo de salida para que todos los sectores económicos del país sepan cuándo podrán regresar a su actividad normal. Los españoles se preguntan cuándo podrán volver a tomar una caña en una terraza, cuándo podrán darse un baño en la playa, o cuándo podrán tomarse una copa en una discoteca o local nocturno. El plan de desescalada prevé todas esas eventualidades.

Playas

Acudir a la playa está dentro de la Fase 3, la última de las cuatro previstas en el plan. Es decir, será lo último que se haga antes de entrar en lo que el Gobierno está definiendo como la "nueva normalidad". El plan prevé poder acudir a la playa "en condiciones de seguridad y distanciamiento". El presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno, ya adelantó que se revisará el aforo de las playas para evitar aglomeraciones este verano.

Al ser la última fase, la playa se hará esperar: en el caso más optimista, la fecha más próxima sería el 8 de junio, aunque las islas de Formentera, La Graciosa, La Gomera y El Hierro, que empezarán en Fase 1 este próximo 4 de mayo, podrían adelantarse y abrir sus playas el 25 de mayo. Por fortuna, los lugares costeros y de temperaturas más cálidas registran un avance del virus menor a los núcleos urbanos, por lo que parece factible que puedan cumplir los plazos mínimos del Gobierno. Eso sí, los que residan en ciudades interiores y quieran acudir a sus segundas residencias en zonas costeras, deben saber que no podrán hacerlo hasta que pase la desescalada; hasta entonces, todo el ámbito de movilidad es la provincia o isla en la que se resida.

Chiringuitos, bares y terrazas

Los chiringuitos de la playa son otro asunto, pues funcionan con las restricciones de los locales de restauración y por tanto sus plazos son distintos: podrán abrir el 4 de mayo para repartir a domicilio, en la Fase 1 habilitar sus terrazas al 30% (todos sentados), en la Fase 2 tanto en interior como en exterior, al 33% de la capacidad y en la Fase 3, hasta el 50% en ambos espacios, también habilitando la barra, aunque garantizando distancia de seguridad. En cualquier caso, muchos chiringuitos se montan y desmontan al principio y final de cada verano, por lo que esperarán a la evolución de la pandemia para tomar o no una decisión.

En los núcleos urbanos, lo de tomarse una caña en una terraza, ahora que llega el buen tiempo, será más factible a partir de la Fase 1, aunque sólo podrán usar un 30% de su capacidad, por lo que encontrar sitio apunta a estar complicado.

Discotecas y locales nocturnos

Otra cosa que, como las playas, no abrirá hasta la última de las cuatro fases, lógico ante la idiosincrasia de estos locales, donde la aglomeración es parte de la diversión. Podrán abrir en la Fase 3 (es decir, como pronto el 8 de junio) a un tercio de su aforo. Y eso es importante, pues el aforo legal de estos recintos depende de cada ayuntamiento, pero suele ser de 0,5 metros cuadrados por persona, un aforo que en muchas ocasiones no se respeta escrupulosamente, algo que sí se hará seguro en estas condiciones. Las discotecas no serán lo mismo, al menos de momento.

Ir a misa

El plan de desescalada también incluye los lugares de culto religioso, de todo tipo. En la Fase 1, es decir, a partir del 11 de mayo como pronto (salvo en las cuatro islas ya mencionadas), se podrá acudir a estas celebraciones ocupando como máximo un tercio del aforo; en la Fase 2, la mitad. Y no se especifica nada en la Fase 3, por lo que deberá seguir a la mitad como máximo hasta que no haya una vacuna o un tratamiento que rebaje completamente el riesgo de contagio.

Hacer deporte

Aquí el abanico es amplio: desde este sábado 4 de mayo se podrá hacer deporte individual (bicicleta, correr, etc), guardando la distancia de seguridad. En la Fase 1, se abrirán las instalaciones deportivas al aire libre para la práctica de deportes sin contacto, como tenis o atletismo. En la Fase 2 se podrá hacer deporte también en espacios cerrados, pero sin contacto o con riesgo de contagio muy bajo. Y en la Fase 3 se insiste en el poco contacto. Es decir: echar un tenis sí, pero la pachanga de fútbol con los amigos tendrá que esperar, al menos de momento.