Deporte y Vida

COVID-19

La primera terapia celular para la COVID-19 reduce la mortalidad en pacientes críticos

Un medicamento celular, desarrollado por investigadores españoles, probado en 13 pacientes intubados en ventilación mecánica ha demostrado ser eficiente para la mejoría clínica de casos críticos de COVID-19.

0
covid-19, salud, enfermedades
Hilda Ríos EFE

Una investigación pionera a cargo de investigadores españoles ha demostrado ser eficiente para la mejoría clínica de casos críticos de COVID-19. El trabajo, el más amplio hasta el momento, ha sido publicado en la revista 'The Lancet EClinicalMedicine', tras demostrar que un tratamiento avanzado basado en la terapia celular, probado en 13 pacientes intubados en ventilación mecánica, reduce la mortalidad de los pacientes críticos de coronavirus del 85% al 15%, es decir, un 70%.

Se trata de los primeros resultados del proyecto BALMYS-19, co-liderado por el profesor de la Universidad Miguel Hernández (UMH) de Elche e investigador del Instituto de Investigación Sanitaria de Alicante (ISABIAL) Bernat Soria, junto con el profesor Damián García-Olmo de la Fundación Jiménez Díaz (Universidad Autónoma de Madrid). Además, en el estudio han participado otras seis universidades y seis hospitales españoles.

La terapia testada se basa en células madre con propiedades regenerativas, antiinflamatorias e inmunorreguladoras y se trata de la primera terapia celular para la COVID-19, desarrollada y producida íntegramente en España. Durante el estudio piloto, se trató a pacientes críticos de coronavirus que no respondían a tratamientos convencionales con el ‘medicamento celular’, compuesto de células mesenquimales estromales alogénicas a dosis de 1 millón de células por kilo de peso en una o varias dosis.

Resultados obtenidos

  • Los resultados de su aplicación en pacientes de coronavirus ingresados en UCIs se compararon con la evolución clínica y mortalidad de casos similares.
  • El tratamiento celular no produce reacciones adversas, pero sí conlleva una mejora clínica y radiológica generalizada.
  • La mortalidad de los pacientes disminuyó del 70-85% al 15% (2 pacientes).
  • La mayoría de personas tratadas con el medicamento celular fueron desintubadas durante el periodo de recogida de datos.
  • Disminuyeron sus marcadores de inflamación (proteína C reactiva y ferritina), coagulación (dímero D) y daño tisular (deshidrogenasa láctica).
  • Además, se constató que el medicamento no disminuye el recuento de linfocitos. De hecho, los resultados apuntan a que el nuevo tratamiento aumenta la presencia de linfocitos T (que atacan directamente al virus) y de linfocitos B (que sintetizan los anticuerpos).

Los autores del estudio explican que los medicamentos celulares, a diferencia de otros tratamientos, son “medicamentos vivos” y deben ser utilizados por personal médico cualificado y producidos por unidades acreditadas por la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios. El conocimiento de los fundamentos científicos biológicos de estos tratamientos, así como de la fisiología de la interacción entre el medicamento y el huésped son imprescindibles para un correcto manejo de los mismos.