Andorra, escenario de fin de fiesta y se volverá a Cataluña
El penúltimo día será otra vez clave para la clasificación final. La Vuelta volverá a apostar por la montaña el último sábado.
La Vuelta 2017 celebró un penúltimo día inolvidable. El final de fiesta en el Angliru, antes de la llegada a Madrid, con Contador levantando los brazos por última vez dio datos de audiencia récords. De ahí que la organización vaya a apostar en 2018 por la misma fórmula de colocar una etapa de alta montaña para cerrar la carrera, y será en Andorra.
Francesc Camp, ministro de Turismo del Principado, levantó la liebre al anunciar que dos etapas se celebrarían en el Principado (este año acogió la tercera) y una de ellas será “de alta montaña, espectacular y que le gustará al público”. El Diari d’Andorra ubicó con seguridad esas dos etapas los días 14 y 15 de septiembre, en las jornadas 19ª y 20ª de la carrera. Algo que encaja a la perfección en el recorrido hipotético y respalda las palabras que Javier Guillén pronunció en As en 2016: “Nos gustaría repetir el etapón de Andorra en 2015 pero el penúltimo día de carrera”. También se habló de la etapa vasca como candidata. En todo caso, jornada que conllevaría un enorme traslado hasta Madrid, pero que cumpliría con la idea del equipo de Guillén: “El sábado final queremos una etapa potente”.
En el camino hacia Andorra está incluida de manera segura Cataluña. La Vuelta, como viene siendo habitual en la última década, ha contado con esta comunidad en el trazado a pesar del convulso momento político. Lleida presentó su candidatura para ser salida o llegada de la carrera.