Russell Westbrook: "Pau Gasol era mi jugador favorito"
El base de los Lakers, Russell Westbrook, se rinde a Pau Gasol después de que el español anuncie su retirada. "Siempre jugó de la manera correcta", asegura.
Cuando las leyendas se retiran, los homenajes se suceden. Y eso es lo que ha pasado con Pau Gasol, un hombre con una magnitud tremenda, el mejor jugador de la historia del baloncesto español y todo un mito dentro de una NBA que no espera a nadie. Tampoco a él, que tuvo que luchar contra todos, avanzar entre las críticas y quitarse la fama de blando para hacerse con dos anillos de campeón, el segundo de ellos, ante los Celtics, el equipo que le castigó en 2008 y por el que se ganó un apodo injusto al que supo dar la vuelta. 18 años en la mejor Liga del mundo avalan a un hombre que se ganó el respeto de todos, Kobe Bryant a la cabeza. Y cuya retirada ha sido cubierta por la inmensa mayoría de medios estadounidenses y por numerosas personalidades del mundo del baloncesto norteamericano.
Adam Silver hizo un comunicado especial para despedir al ala-pívot, que vio como Shams Charania anunciaba que los Lakers le retirarían su camiseta, que colgaría, junto a la de otras muchas leyendas, en lo más alto del Staples Center. También al lado de la de Kobe, su amigo, su compañero, su hermano. En esa ceremonia, si todo sigue su curso, estarán Anthony Davis o LeBron James. También Dwight Howard, su compañero durante la temporada 2012-13. Y, si todo va bien, ahí estará Russell Westbrook, un jugador convertido en estrella, una estrella estrellada, un hombre que no siempre, o casi nunca, ha contado con la aprobación de la opinión pública, ese lugar en el que se ganan y se pierden las batallas que deciden las guerras. Un baloncestista que busca, ante todo, su redención particular, una que le ayude a escapar del sainete de individualista que siempre le ha perseguido. Un base que quiere demostrar que puede estar en un equipo ganador.
Westbrook ha sido uno de los muchos jugadores que ha rendido homenaje a Pau Gasol. Lo ha hecho en declaraciones recogidas por Silver Screen and Roll, asegurando, de forma un tanto sorpresiva, que el español era su jugador favorito en su formación. "Era mi jugador favorito. Me gustaba cómo jugaba. Era un hombre grande que podía pasar, lanzar, anotar... Siempre me fijé en él, siempre jugó de la manera correcta". Declaraciones que han sido muy compartidas en las redes sociales y que dejan patente la gran admiración que el base sentía hacia uno de los hombres altos más talentosos del siglo XXI, uno que tenía una inteligencia heredada del baloncesto europeo y que siempre se pudo moldear a todo tipo de características y estilos. Lo que hizo, por ejemplo, que pillara antes que nadie la complejidad del triángulo ofensivo de Phil Jackson, entrenador legendario que le dirigió en sus dos anillos de campeón.
Pau y Westbrook se han enfrentado en numerosas ocasiones. En 2010, en primera ronda de playoffs, el ala-pívot anotó el palmeo ganador al recoger un caprichoso intento en suspensión de Kobe Bryant y eliminó a los Thunder en el sexto partido, silenciando el estruendoso ruido de Oklahoma. Tras el encuentro, se fundió en un abrazo con Russ, que vivía sus primeros años en la competición norteamericana (llegó en 2009 y Pau en 2001) y ya mostraba características físicas que le permitirían, en los años siguientes, convertirse en un jugador histórico y en el rey de los triples-dobles. Pau y Westbrook también coincidieron en el All Star de 2011, el primero del base y el cuarto del español, que sumó seis en total. Y estuvieron frente a frente en la final de los Juegos Olímpicos de 2012, cuando Estados Unidos derrotó a España en uno de los mejores partidos que se recuerdan del baloncesto FIBA. El mejor, perfectamente puede ser el de 2008, otra final entre los mismos contendientes.
Westbrook siempre tuvo una gran relación con Kobe Bryant. La Mamba Negra le apadrinó en sus primeros pasos en la NBA y mantuvo contacto telefónico constante con él incluso después de su retirada. Siempre estuvo disponible para cuando el base tuviera dudas sobre la competición, su adaptación a la misma o en cómo convertirse en una estrella. Y precisamente, su relación con Kobe fue lo que le acercó más a Pau, tal y cómo ha reconocido en las declaraciones ya mencionadas. Una historia sorprendente que eleva todavía más el nivel de Pau, que no sólo cuenta con el respeto de los españoles y es admirado en toda Europa. También en Estados Unidos es un personaje increíblemente respetado y un deportista ejemplar que ha dejado su huella en la mejor Liga del mundo, ha ganado numerosos premios y ha tenido un caracter afable que le ha permitido llevarse bien con prácticamente todo el mundo. No todo son las cualidades deportivas, esas que Westbrook alaba. El resto también cuentan. Y Pau, claro, las tenía.