Solo cinco españoles en la NBA y solo uno con contrato asegurado
Sigue la recesión española en la NBA a las puertas de una temporada 2020-21 en la que la situación más estable es la de Ricky Rubio... que además podría ser traspasado.
En el verano de 2016, los hermanos Hernangómez y Álex Abrines, la siguiente generación de talento, decidieron dar el salto a la NBA. Juancho acababa de ser drafteado por los Nuggets (número 15), Willy había sido seleccionado y traspasado a los Knicks un año antes (número 35) y los Thunder tenían los derechos de Abrines desde 2013 (número 32). Además, Sergio Rodríguez, con 30 años, decidió firmar con Philadelphia 76ers para intentar quitarse el mal sabor de boca que le dejó su inestable primer paso por la liga (Blazers, Kings y Knicks entre 2006 y 2009). En Estados Unidos ya estaban los dos hermanos Gasol, Ricky Rubio, José Manuel Calderón, Niko Mirotic y Serge Ibaka. Así que la temporada 2016-17 comenzó con un récord que habría hecho frotarse los ojos a muchos aficionados un buen puñado de años antes: diez jugadores españoles en la NBA.
En la primavera de 2019 se batió otro récord: siete españoles en los playoffs. Marc Gasol y Serge Ibaka fueron campeones tras derrotar en la final del Este (antes de destronar a los Warriors) a los Bucks de Niko Mirotic y Pau Gasol (que estaba lesionado). Además, Ricky Rubio cayó en primera ronda en sus últimos partidos con la camiseta de Utah Jazz, José Calderón jugó diez minutos en tres de los cuatro partidos del 4-0 que se llevaron sus Pistons ante los Bucks y Juancho Hernangómez vivió con un pie fuera de la rotación un recorrido tremendo de los Nuggets, que perdieron en su pista un séptimo partido de segunda ronda que les hubiera conducido a su primera final del Oeste desde 2009, la que sí alcanzaron en la burbuja de Florida, aunque ya sin el ala-pívot español en su roster. La marca, excelente, podría haber sido mejor aún: Álex Abrines había salido de forma abrupta de OKC Thunder en febrero por los problemas personales que le hicieron regresar a España y, finalmente, firmar de nuevo con el Barcelona.
La pasada temporada comenzó con la representación española reducida oficialmente a seis, que fueron cinco porque la maldita lesión en el pie de Pau Gasol no progresó al ritmo previsto y el pívot se desvinculó de los Blazers en noviembre sin haber llegado a entrar en la dinámica del que iba a ser su nuevo equipo. José Manuel Calderón, otra leyenda de nuestro baloncesto, anunció su retirada y pasó a trabajar para el sindicato de jugadores (NBPA). Además de estos dos ilustres veteranos, se habían caído de la parrilla dos jugadores que por edad y talento parecían destinados a seguir en la NBA: el citado Abrines y Mirotic, que sorprendió con su fichaje por el Barcelona, donde está cumpliendo ya su segunda temporada.
El draft tampoco ha ayudado a regenerar la representación española. El último jugador seleccionado fue Juancho Hernangómez, número 15 en 2016. En los cinco años anteriores fueron elegidos tres jugadores, y solo uno (su hermano Willy: número 35 en 2015) sigue también en la NBA. Ya no está Abrines (número 32 en 2013) y no llegó a plantearse el salto Dani Díez (54 en 2015). Antes, Mirotic (23 en 2011) es un islote que une ese presente menos opíparo con unos años de excelente cosecha, la de la generación de jugadores que siguió a los júniors de oro. Entre 2006 (cuando España fue campeona del mundo) y 2009 fueron elegidos Sergio Rodríguez, Marc Gasol, Rudy Fernández, Serge Ibaka, Ricky Rubio, Víctor Claver y Sergio Llull. De ellos, Ricky es ya un experimentado base titular, Ibaka y Marc han sido campeones (y con mucho peso específivo) con los Raptors y Rudy, Sergio y Claver están de vuelta en Europa. Llull, tentado muy seriamente por los Rockets, no se ha movido del Real Madrid.
Así que de cara a la nueva temporada 2020-21, que arrancará oficialmente el 22 de diciembre, continúa la recesión española en la NBA: solo cinco representantes… que podrían ser menos, ya que solo uno tiene contrato totalmente garantizado, Ricky Rubio, y los otros cuatro tienen que decidir su futuro cuando se abra el mercado, el próximo día 20. En algunos casos, ya ha habido rumores de regreso a Europa. Esta es la situación de los cinco a unos días de que se decida su futuro:
MARC GASOL (35 años, agente libre)
La temporada pasada no fue fácil para Marc Gasol, que se había acogido a la player option que tenía por unos 25,6 millones de dólares para agotar su último año de contrato en Toronto Raptors, un campeón que defendió con dignidad su corona: pese a la salida de Kawhi Leonard, los canadienses fueron uno de los mejores equipos de la Regular Season y no cedieron hasta el séptimo partido de su semifinal del Este contra Boston Celtics.
Marc venía de una temporada de ensueño en la que se proclamó campeón de la NBA y, después, del mundo con la Selección española, donde tuvo un papel crucial. Quizá, ya veterano, pagó el precio de un curso tan exitoso pero también tan exigente. El caso es que tuvo problemas musculares, bajó sus prestaciones de forma visible y tampoco pudo subir su nivel en los playoffs de la burbuja, a pesar de los cuatro meses de parón en los que llamó la atención por su puesta a punto física. En las eliminatorias no estuvo a su nivel habitual en defensa y bajó sus números a 6 puntos, 4,4 rebotes, 2,6 asistencias con un pobre 18% en triples, un arma que le había resultado muy útil en las temporadas anteriores.
Después de una década brillante en Memphis y de un año para el recuerdo en Toronto, el pasado curso fue más complejo para Marc, que cumplirá 36 años en enero y que ahora es agente libre. Se ha rumoreado que podría regresar a Europa y jugar en el Barcelona, pero por ahora no ha habido contactos reales y, básicamente, eso solo sucederá si el pívot elige volver. Su lugar, si no es así, sigue estando en la NBA. Está en la situación óptima, como veterano con excelente reputación, para firmar con un aspirante al anillo y buscar su segundo título. También podría seguir en Toronto o buscar, sencillamente, una última oferta económica lo más jugosa posible. Como agente libre, todas las opciones están abiertas para el que ha sido uno de los mejores pívots del mundo en la última década.
SERGE IBAKA (31 años, agente libre)
El ala-pívot español de origen congoleño comparte situación con Marc Gasol en muchos sentidos: formó parte de los Raptors campeones en 2019 y del equipo que defendió el título hasta donde le llegaron las fuerzas la pasada temporada. Jugó a un nivel más alto que Marc y subió su caché, algo que ha hecho desde que Nick Nurse se convirtió en entrenador de la franquicia canadiense. Ahora, ya con un título y casi 100 millones de dólares ganados solo en contratos deportivos en la NBA, Ibaka es agente libre con muchas y muy buenas opciones ante él.
Puede seguir en Canadá, y de hecho los Raptors podrían optar por retener a uno de los dos, o Marc o Ibaka. Se ha hablado de una posible gran oferta por una sola temporada, ya que la franquicia quiere tener sus cuentas limpias en 2021, cuando haya muchas estrellas a tiro (los Raptors suspiran por Antetokounmpo). Eso permitiría a Ibaka firmar un contrato muy alto y volver al mercado al final de la temporada, todavía con 32 años. Pero también puede optar por buscar un acuerdo en otra franquicia por más años y una cantidad económica total más alta. O puede irse a un aspirante al título, seguramente perdiendo dinero pero con opciones de volver a ser campeón. Su perfil es muy valorado: un interior rápido, fuerte, intenso en defensa, que puede jugar de cuatro y de cinco, muy físico y con buena mano para lanzar desde la línea de tres. Ya ha sonado, de hecho, para equipos como Lakers y Clippers, dos gigantes que buscan un pívot de sus características; para eternos aspirantes como los Rockets y también para proyectos emergentes como el de los Mavericks de Luka Doncic. Así que es obvio que Ibaka seguirá en la NBA, que tiene por delante unos días muy interesantes y que los afronta desde una situación privilegiada.
RICKY RUBIO (30 años, Phoenix Suns)
Ricky es, ahora mismo, el puntal de la representación española en la NBA mientras apura sus pasos en la gran Liga el extraordinario Marc Gasol. El base de El Masnou va a completar su décima temporada en la Liga, y es el único de los nuestros con contrato plenamente garantizado. En el verano de 2019, después de seis años en Minnesota y dos en Utah, firmó con Phoenix Suns y por tres temporadas y 51 millones. Tiene asegurados 17 millones esta próxima temporada y 17,8 la siguiente (2021-22).
Muchos creían que, más allá de la suculenta oferta económica, Ricky daba un paso atrás en lo deportivo tras su salida de los Jazz, un equipo que lleva años peleando por estar en la elite del Oeste. Sin embargo, la primera temporada en Arizona fue excelente para Ricky, que venía además de ser campeón y MVP en el Mundial, con España. Los Suns, en años anteriores una organización disfuncional y un equipo desastroso, compitieron muy bien con nuevo entrenador (Monty Williams) una tremenda estrella joven (Devin Booker) y un papel brillante de Ricky como director y veterano: 13 puntos, 4,7 rebotes, 8,8 asistencias y un notable 36% en triples. Su equipo ganó todos los partidos en la burbuja de Florida (8-0) y estuvo a punto de firmar el milagro y meterse en sus primeros playoffs desde 2010.
Así que Ricky afronta el futuro en una situación envidiable… aunque en la NBA nunca se sabe del todo. Cuando se abra el mercado la próxima semana, puede haber movimientos serios en los Suns y estos podrían afectar el base español. En las últimas horas se da por sentado que la franquicia, que afronta el futuro con mucha ambición, está trabajando con Oklahoma City Thunder para hacerse con Chris Paul, un base ya de 35 años pero uno de los mejores de la historia en esa posición. Eso podría hacer que Ricky, para cuadrar salarios y porque quedaría sin sitio en el quinteto titular, fuera traspasado un equipo en reconstrucción como los Thunder. Pero también podría ser (una vez más: en la NBA nunca se sabe) que una tercera franquicia se metiera en la operación y se llevara a Ricky. Los Clippers, uno de los aspirantes al título, es una de las que busca director de juego. Así que Ricky puede, sin que medie su opinión, tener que cambiar de aires en los próximos días. Bien a un destino peor, bien a uno en lo deportivo todavía mejor. Así es la NBA. Pero esto es seguro: su contrato está garantizado por dos temporadas y su reputación pasa por el mejor momento desde su llegada a la NBA.
JUANCHO HERNANGÓMEZ (25 años, agente libre restringido)
Juancho Hernangómez seguirá en la NBA, de eso no hay duda en principio. Y es muy probable que continúe en Minnesota Timberwolves, el equipo al que llegó traspasado desde Denver Nuggets el 5 de febrero. El ala-pívot español había pasado tres temporadas y media en las Rocosas, en un equipo de altas aspiraciones y con una larga lista de forwards (aleros y ala-pívots). Eso le hizo tener rachas brillantes y otras en las que desaparecía de la rotación. Pero en su nuevo destino, en los Wolves, encontró una oportunidad perfecta. Jugó catorce partidos, todos como cuatro titular, y pasó de los 3,1 tiros por noche en Denver antes del traspaso a 9,8. Lo aprovechó: 12,9 puntos y 7,3 rebotes de media con un 42% en triples lanzando 4,9 por noche. Ideal para unos Wolves que quieren jugar con tiradores abiertos alrededor de su pívot estrella, Karl-Anthony Towns.
Juancho cobró 3,3 millones de dólares la pasada temporada, y ahora será agente libre restringido. Los Wolves le extenderán una qualifying offer de 4,6 millones para retener sus derechos. Si recibe una oferta superior, el equipo tiene la capacidad de igualarla y quedarse con él o no hacerlo y dejar que cambie de aires. Juancho también podría firmar por esos 4,6 millones solo para la próxima temporada y ser agente libre sin ninguna restricción en el verano de 2021. En la NBA se habla de que Juancho podría buscar unos 7 millones de dólares al año, pero como agente libre restringido depende de los movimientos del mercado y de las ofertas que lleguen. Si estas no son buenas, los Wolves tendrán la sarten por el mango. La franquicia, en todo caso, ha asegurado que quiere seguir contando con él aunque hay muchas incertidumbres sobre hacia donde se moverá en el mercado el equipo, conviene recordarlo, que tiene el número 1 del draft y que parece que será el destino NBA de Facundo Campazzo.
WILLY HERNANGÓMEZ (26 años, agente libre)
Si la continuidad de Juancho en la NBA parece segura, la de su hermano Willy está en el aire. El pívot es agente libre sin restricciones, y tiene que buscar acomodo en un verano complicado por la situación del mercado en plena crisis del coronavius. Se ha rumoreado que podría regresar a Europa, y una opción obvia sigue siendo el Real Madrid, que no se hizo con ningún cinco tras el frustrado fichaje de Ante Zizic.
Sin embargo, la voluntad de Willy es seguir en la NBA, así que parece lo más probable que encuentre un destino en el que trataría de relanzar su carrera en EE UU. Llegó en 2016 y ha jugado en Knicks y Hornets, por ahora sin la continuidad necesaria, con flashes de su potencial en ataque y serios problemas a la hora de defender. La pasada temporada no fue nada buena para él. En unos Hornets en reconstrucción y sin aspiraciones, donde podía haber tenido una buena ocasión de acumular minutos, solo disputó 12,1 de media en 31 partidos, y acabó en 6,1 puntos y 4,3 rebotes. Willy, ya con 26 años, seguirá buscando su lugar en la NBA. Y si finalmente no lo encuentra, en Europa se le abrirán rápido puertas. Muchas e importantes…