Los Pistons quieren regresar a playoffs. Eso está claro. Después de no pisar las eliminatorias por el título desde 2016 con Stan Van Gundy en el equipo, los antes denominados 'Bad Boys' buscan volver a una fase final de la que antes era muy raro verles bajarse. En el último duelo disputado, el equipo ahora dirigido por Dwayne Casey se impuso a los Toronto Raptors y se consolida en la sexta posición de la Conferencia Este con cuatro partidos y medio de ventaja sobre los Magic, novenos en estos momentos.

Detroit demostró ante su público el carácter y la determinación que se le exigen a un equipo de playoffs dando una gran lección de coraje y de sintonía colectiva. Empezaron en tromba, supieron aguantar el tiró visitante en el tercer cuarto (los Raptors se pusieron por delante) y resolver en los minutos calientes ante un rival que tiene piezas de un talento superlativo pero que no terminan de cuadrar grupalmente desde que incorporaron a sus últimos fichajes. 

Blake Griffin volvió a liderar a los suyos y a tomar las decisiones correctas en los momentos oportunos (25 puntos  y 8 rebotes con una canasta clave a 40 segundos del final) y se está transformando por el camino en el jugador que un día se pensó que podía llegar a ser. Drummond (15+17 en este choque) parece (por fin) trasladar sus espectaculares estadísticas al juego del equipo y Reggie Jackson (20 puntos) está lo suficientemente contenido para saber ceder el balón cuando toca o jugarse un tiro importante cuando es necesario. 

La madurez es algo que Casey también ha conseguido llevar al grupo. El criticado entrenador, que tiene la etiqueta de valer para la regular season pero no tener lo suficiente para los playoffs está consiguiendo dar a su equipo algo de lo que antes carecía: consistencia. Los Pistons recibieron 37 puntos en un tercer cuarto nefasto para recuperarse en el último con un parcial de 32-23 y sentenciar en el ya mencionado clutch time.

Mientras los Pistons se acercan más y más a los playoffs, los Raptors entran en una pequeña crisis y siguen intentando cuadrar sus piezas. Leonard hizo 33 puntos y 10 rebotes, pero el resto del equipo estuvo apagado y parece que Nurse aun no tiene claro como sacar lo mejor de Marc en el actual esquema de juego del equipo. El español hoy tanteó con el triple-doble (9+11+8) pero sigue lejos de los números de su carrera. Lo mismo pasa con Lin. Cambios (que pueden salir mal o bien) que tienen que cuadrar del todo en menos de un mes si los Raptors quieren llegar lejos en playoffs. Una post temporada a la que no parece que vayan a faltar los Pistons.