Chicago Bulls: una nueva era toma forma en la Ciudad del Viento

AÑO DE CREACIÓN: 1966

PABELLÓN: United Center

PROPIETARIO: Jerry Reinsdorf

GENERAL MANAGER: Gar Forman

ENTRENADOR: Fred Hoiberg (desde 2015)

TÍTULOS: 6 (1991, 1992, 1993, 1996, 1997, 1998)

PASADA TEMPORADA: 27-55 (fuera de playoffs)

PRINCIPALES ALTAS: Wendell Carter Jr, Chandler Hutchison, Rawle Alkins, Jabari Parker, Jakarr Sampson, Derrick Walton.

PRINCIPALES BAJAS: Jerian Grant, Sean Kilpatrick, David Nwaba, Noah Vonleh, Paul Zipser.

CONTRATOS MÁS ALTOS 2018-19: Jabari Parker (20), Zach LaVine (19,5), Robin Lopez (14,3), Omer Asik (11,2).

PRINCIPALES JUGADORES EN ÚLTIMO AÑO DE CONTRATO: Robin Lopez (Omer Asik, team option 2019-20), Justin Holiday.

PLANTILLA: Pincha en este enlace 

ANÁLISIS: la ilusión inicia el camino de regreso

Hace justo un año, las cosas en los Bulls, una franquicia histórica y una de las que puede presumir de un apoyo social más robusto en su área geográfica, iban peor que regular. La reconstrucción parecía mal dirigida, Fred Hoiberg un entrenador sin autoridad y el traspaso de Jimmy Butler una concesión excesiva a los Timberwolves. La resaca post Thibodeau (una que se avecina ya en Minny también) no solo parecía dura, como cualquier reinicio, sino también confusa, un problema mayúsculo para acortar plazos. Que es de los se trata cuando se entra en derribo y reforma integral.

Sin embargo, la temporada pasada fue dejando un pequeño reguero de buenas noticias, algo impensable cuando el incidente de Portis y Mirotic estropeaba la puesta de largo de Lauri Markkanen. Pero después el finlandés dejó trazas de gran estrella, Kris Dunn regresó a la vida lo justo para que se piense en un futuro interesante (tiene 23 años) y este verano han llegado Jabari Parker (un talento extraordinario con unas rodillas complicadísimas) y Wendell Carter Jr, un número 7 del draft que apunta a pilar fundacional junto a Markkanen, otro número 7 (un año antes), al que protegerá con su defensa y con el que, en principio, debería complementarse a la perfección en el juego interior.

¿Serán buenos estos Bulls? Seguramente todavía no. Pero serán divertidos. Un equipo con puntos y poco instinto más allá de un Dunn obligado a seguir mejorando como playmaker y el rookie Carter. Zach LaVine se ha quedado a golpe de talonario (los Bulls igualaron el 78x4 que pusieron encima de la mesa los Kings) y Denzel Valentine afronta un año importante en el que tiene que demostrar si finalmente va o viene, con el rookie Chandler Hutchison como nueva competencia.

En teoría, Hoiberg va poco a poco teniendo un equipo cada vez más parecido a lo que le gustaría tener. Esta temporada también será un examen para él, cuestionado desde su muy discreto aterrizaje en la 2015-16. Quienes hablan de playoffs equivocan el tiro por mucho que puedan abaratarse los últimos billetes del Este. Los Bulls parten con otro objetivo, uno que tiene que ver con cimientos, argamasa y muros de carga sólidos. La reconstrucción ha dado un giro muy positivo en los últimos doce meses. Y sobre eso han de edificar.