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JAZZ 106 - NUGGETS 96

Ricky (9+10), 3.000 asistencias y primer gran triunfo en Utah

El base, tercer jugador más rápido en activo en llegar a esa cifra. Remontada genial de los Jazz con un enorme Alec Burks. Joe Johnson fue clave.

SALT LAKE CITY, UT - OCTOBER 18: Ricky Rubio #3 of the Utah Jazz gestures after a first half call during their game against the Denver Nuggets at Vivint Smart Home Arena on October 18, 2017 in Salt Lake City, Utah. NOTE TO USER: User expressly acknowledges and agrees that, by downloading and or using this photograph, User is consenting to the terms and conditions of the Getty Images License Agreement.   Gene Sweeney Jr./Getty Images/AFP
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SALT LAKE CITY, UT - OCTOBER 18: Ricky Rubio #3 of the Utah Jazz gestures after a first half call during their game against the Denver Nuggets at Vivint Smart Home Arena on October 18, 2017 in Salt Lake City, Utah. NOTE TO USER: User expressly acknowledges and agrees that, by downloading and or using this photograph, User is consenting to the terms and conditions of the Getty Images License Agreement. Gene Sweeney Jr./Getty Images/AFP == FOR NEWSPAPERS, INTERNET, TELCOS & TELEVISION USE ONLY ==Gene Sweeney Jr.AFP

La división más complicada de la NBA actual arrancó la madrugada del miércoles al jueves con un triunfo de mucho mérito de Utah Jazz. Ricky Rubio, presentado como una estrella en su nueva casa, hizo un partido muy serio en su debut. No fue vital en la remontada, pero sí tuvo papel de actor principal en momentos importantes y repartió su asistencia número 3.000 en la mejor liga de baloncesto del mundo, una cifra a la que solo han llegado en menos partidos entre los jugadores en activo dos superestrellas de la competición como Chris Paul y John Wall

Los Nuggets, con solo seis minutos de Juancho Hernangómez, arrancaron la temporada en su mejor versión, la esperada por todos. Jokic repartía (7+12+8), Harris ejecutaba por fuera (14, solo siete tiros y 3/3 en triples) y Will Barton se ponía las botas desde el banco (acabó con 23 y llegó a los 21 en solo siete tiros con un tramo imparable en la primera mitad). Con dobles dígitos de ventaja, la segunda unidad de los Jazz cambió el partido entre el final del tercero y el principio del cuarto. Apretaron las tuercas en defensa a uno de los mejores ataques de la liga y explotaron en ataque hasta lograr un parcial que rondó el +20 antes de que volvieran los titulares.

Joe Johnson fue clave. Otra vez. Otra vez en su carrera. Salvó a los Jazz varias veces en secuencias ofensivas sin rumbo, anotó un triple imposible sobre la bocina del tercer cuarto que cambió el viento y provocó un par de pérdidas defendiendo a Jokic en el poste. Jugadas de pura experiencia, del que se las sabe todas. Y mientras apareció ese gran jugador de baloncesto que podría haber sido Alec Burks. Eléctrico en la penetración y certero en el lanzamiento, reventó el choque. Poco más de 100 partidos en las últimas tres temporadas para un auténtico jugón que a sus 26 años ya conoce nombre y apellido de casi todas las lesiones.

En el debut de un Millsap (19+6, solo una asistencia) que está aprendiendo a jugar con Jokic, las 3.000 de Ricky fueron la cifra de la noche. El español, fiel a su estilo, empujó a los Jazz en transición siempre que pudo y encontró ventajas con sus pases, sobre todo para Favors. También estuvo intenso y acertado en defensa, provocando varias pérdidas de los jóvenes exteriores de los Nuggets que terminaron de cerrar el partido.

Rudy Gobert se fue hasta los 18 puntos (10 rebotes) en el primer partido de la etapa post-Hayward, el novato Donovan Mitchell dejó grandes sensaciones pese a sus nervios (10 puntos en 26 minutos y alguna que otra prisa...) y los Jazz de Quin Snyder pusieron un primer triunfo importante, contra rival de división, en el casillero. Ricky mira por encima del hombro a sus Wolves, que cayeron en San Antonio. Unos Wolves a los que se medirá el viernes en su querida Minneapolis.