INGLATERRA
Guardiola, en el juicio contra Mendy: “No soy su padre”
El entrenador del Manchester City describió al futbolista, acusado de violación, como “un buen chico” pero insistió en que no controlaba su vida privada.
Pep Guardiola ha declarado en el juicio al que se enfrenta desde hace meses Benjamin Mendy por siete presuntos delitos de violación, uno de intento de violación y otro de asalto sexual. El futbolista francés sigue suspendido por el Manchester City, por el que fichó en 2017, y su entrenador ha expresado en su declaración ante el jurado que él tan solo controla lo que ocurre con sus futbolistas tanto en el vestuario como en el terreno de juego, pero no así su vida privada: “No soy su padre”, espetó.
“Controlo a mis jugadores cuando estamos juntos en las sesiones de entrenamiento. En su vida privada no sé lo que hacen. No sigo a los jugadores en las redes sociales, así que no sé qué están haciendo fuera de mi control en los entrenamientos y en los partidos”, declaró. Según él, “notaría de inmediato” si existiera alguna dificultad entre algunos de sus jugadores en la ciudad deportiva del club, pero en lo que ocurre fuera no se puede meter.
Guardiola compareció ante el tribunal y confesó estar al tanto de los hechos que se le imputan a Mendy, alegando además que solo se había decidido a declarar porque el jugador se lo había pedido: “Me pidió que viniera para estar aquí con todos ustedes y por eso estoy aquí”. Además, el técnico le dedicó unas buenas palabras al lateral: “Es un chico muy bueno, diría que muy generoso. Creo que es feliz y recuerdo cuando estábamos juntos y todos le pedían favores y él estaba dispuesto. Es un chico muy generoso. Creo que se adaptó muy rápido al equipo y diría que era muy feliz ayudando a los demás”.
Benjamin Mendy y su amigo Louis Saha Matturie están acusados de violar a varias mujeres durante veladas en la mansión del futbolista en Cheshire. El jugador francés ha negado todos los cargos, de igual manera que un Matturie que ha rechazado las acusaciones de seis cargos de violación y tres más de agresión sexual sobre siete mujeres. Ambos han defendido que las relaciones sexuales que mantuvieron fueron consensuadas. El juicio sigue su curso.