La 'rajada' de María Galiana sobre 'Cuéntame' y 'MasterChef'
La reconocida actriz, que da vida a Herminia en la histórica serie de TVE, fue la protagonista del último 'Salvados', donde sorprendentemente habló de estos programas.
María Galiana reapareció en las últimas horas en televisión siendo la gran protagonista de 'Salvados', donde charló con Gonzo sobre varios aspectos de su vida y de la actualidad, llamando la atención de sus seguidores y espectadores por lo que dijo sobre 'Cuéntame', una serie gracias a la que ha consolidado su fama. En esta da vida a Herminia, uno de los personajes más carismáticos de la serie, aunque que se le conozca mayoritariamente por su papel en la serie no es algo que precisamente le haga demasiada gracia.
Las cosas que motivan su hartazgo de 'Cuéntame'
"A veces mi sinceridad me lleva a cometer imprudencias. Estoy muy obsesionada con que las cosas se digan como son y no se envuelvan", ha comenzado advirtiendo. "No me sentó mal, me pareció la cosa más injusta que yo he visto en mi vida. Pedazo de buen actor, pedazo de buena persona que tenía al público en su bolsillo, porque Juan tiene una capacidad extraordinaria, y eso en esta serie es vital. La gente no quiere ver dramas, la gente no quiere ver hospitales, la gente no quiere ver una cosa mala y otra más mala, Juan le daba el punto exacto de humor a las cosas más importantes que podrían suceder", ha señalado sobre la salida de Juan Echanove.
Después de estas declaraciones, reconoció estar "un poco harta de 'Cuéntame', pero no tengo más remedio. Tengo un estatus que está muy relacionado con la serie, en cuanto a mi vida con mis hijos y nietos", ha reconocido. Tampoco le gusta que se le conozca como 'la abuela de España', y ha añadido sobre la serie que, como actriz, ha sido "la gran decepción" de su carrera, precisamente por no haber interpretado otros papeles.
A María Galiana no la veremos en 'MasterChef' en futuras ediciones, y es que la actriz ha querido dejar clara su opinión sobre el concurso: "Me han ofrecido ir a 'MasterChef' pero no iría aunque me ofrecieran todo el oro del mundo, no tiene rigor. Lo más importante de la cocina es la lentitud. No pongo un pie ahí ni loca", sorprendió.