El drama de Marina Díez, de 'Gran Hermano 1": de la ruina y la enfermedad al desahucio
La madrileña que participó en la primera edición del reality ha tenido que enfrentarse a continuos obstáculos, el último: la pérdida de su negocio.
En el año 2000, un concurso cambió la forma de entender la televisión bajo el lema de 'Bienvenidos a la vida en directo'. Ese año nacía 'Gran Hermano' con diez concursantes (serían finalmente catorce por los cuatro abandonos voluntarios que obligaron a la entrada de otras cuatro personas) que alcanzaron el estrellato, aunque algunos lo disfrutaron tan solo de manera efímera. Una de ellas fue Marina Díez, participante madrileña que por aquel entonces tenía 23 años, trabajaba como teleoperadora y terminó en séptima posición.
Su vida cambió radicalmente tras salir de la casa que en aquella época el concurso instalaba en Soto del Real: se divorció al regresar a su vida normal y se mudó a Benidorm. Pero su nombre rápidamente desapareció de la televisión y desde entonces ha aparecido en contadas ocasiones y siempre por alguna desgracia. Como en los últimos días, que ha vuelto a estar de actualidad porque ha sido desahuciada del bar que regentaba en un centro para la tercera edad de Badia Gran, en Mallorca.
"Para sacarme del local optaron por romper el convenio que tenían con el Ayuntamiento argumentando que debido a la COVID-19 se necesitaba el espacio para usos educativos", expresó la joven según Jaleos. Marina ha puesto el caso en manos de sus abogados porque el convenio supuestamente terminaba el próximo mes de febrero, pero ha devuelto las llaves de un negocio al que llevaba años dedicándole horas y esfuerzo. "Detrás de este desahucio hay una serie de desavenencias con algunos integrantes de la directiva".
De la ruina a la enfermedad
Los últimos años no han sido fáciles para Marina Díez. En 2012 reapareció en televisión, concretamente en el programa 'Qué tiempo tan feliz' de María Teresa Campos, para confesar que estaba arruinada y que no había conseguido trabajo en cuatro años. "Mi situación es desesperada, un infierno. Ahora no hay trabajo, y cuando llego a un trabajo me focalizan en 'Gran Hermano' y ni me dan una oportunidad".
"En la radio me formé y me convertí en una buena locutora. Presentaba 'Hoy por hoy Benidorm'. Decidí irme porque me vine arriba. Estaba en Alicante y pensé que podría venir a Madrid a buscar otras radios (...). No cuajó y volví a Alicante, pero ya al fin de semana", confesaba entonces. Según ella, los problemas empezaron en 2008 con la crisis económica: "Me compré una casa en 2006, el euríbor pegó un salto brutal, perdí el trabajo y no puede hacer frente a ello y perdí la casa".
Sin embargo, esas no fueron las únicas penurias a las que ha tenido que enfrentarse, pues también sufrió la falta de buena salud el pasado año. Con motivo del 20 aniversario del reality que la puso en millones de televisiones en España y en uno de los peores momentos de la pandemia de coronavirus, se sinceró: "Hace un año me operaron de cuatro bypass coronarios y desde entonces la vida la veo de otra manera muy diferente. ¡Vivir es maravilloso!", expresó.