La ruptura en El Bohío, el restaurante de Pepe Rodríguez
Su hermano Diego ha decidido dejar la jefatura de sala después de varias décadas de trabajo para centrarse en un negocio personal.
Pepe Rodríguez presume siempre que puede de El Bohío, el restaurante situado en Illescas que fue fundado a principios del siglo pasado por su abuela y su tía abuela. En él ha depositado durante muchos años incontables horas de trabajo y mucha ilusión, aunque para alcanzar el éxito ha contado con la compañía de un socio de mucho nivel, su hermano Diego. Pepe como chef y Diego como jefe de sala han estado casi 40 años al pie del cañón en El Bohío, pero desafortunadamente este trabajo en común ha llegado a su fin hace algún tiempo.
Los hermanos Rodríguez Rey continúan siendo socios de la empresa, tal y como apunta este martes Vanitatis, pero Diego ha optado por dejar de trabajar allí y emprender una aventura empresarial en solitario. "Necesitaba un respiro. Con la entrada de Pepe en 'MasterChef' Diego se cargó de demasiadas responsabilidades y al final prefirió apartarse, darse un descanso. Ahora dirige un negocio hostelero por su cuenta", deslizan fuentes cercanas al mencionado portal.
En esta nueva etapa, el hermano de Pepe se hace llamar simplemente Diego Rey y se ha decantado por un negocio en el que suministra mobiliario y diferentes utensilios a restaurantes, entre ellos el que ha desarrollado durante varios décadas. Se trata de "un servicio integral, asesoramiento en cualquier aspecto relacionado con la hostelería y la restauración", con "porcelanas, cuberterías, cristalerías, utensilios de cocina a precios competitivos adaptados a su negocio".
Eso sí, en este particular 'divorcio', "no ha habido ni malos rollos ni nada, simplemente un cambio de aires". "Pepe puede dedicarse a la cocina y a sus otros actividades y Diego quería mantenerse con cierta distancia", aseguran fuentes cercanas a la productora Shine Iberia.
Golpeados por la pandemia
La pandemia de coronavirus ha golpeado con fuerza casi todos los sectores de la economía y especialmente a la hostelería y la restauración. Pepe nunca ha ocultado las duras crisis que ha sufrido en El Bohío, pero también Diego se ha visto afectado los dos últimos años de lo que trata de salir con trabajo y dedicación diaria.