El crudo relato de Adele: de sus relaciones "tóxicas" a la causa de su transformación física
La cantante británica ha roto su silencio tras cinco años para explicar cómo se siente antes de la inminente publicación del primer single de su nuevo disco.
El éxito de Adele (33) fue tan rotundo y meteórico que pilló desprevenido a la mayoría. Incluso a ella. Su disco de debut, '19', fue un adelanto de lo que llegaría con '21', su segundo trabajo y una explosión a todos los niveles. La británica se sacó de la manga una obra magnífica que fue directa al corazón de millones de personas y que contiene alguna de las mejores canciones que se han grabado en los últimos 10 años.
Ahora, la británica ha anunciado su regreso a bombo y platillo tras publicar su tercer álbum en 2015 (25) y desaparecer literalmente del mapa. ‘Easy On Me’, que se lanza el 15 de octubre, será la primera andanada de un disco que según la artista será su mejor trabajo hasta la fecha. Palabras mayores.
“Es un disco muy especial para mí. Siempre digo que '21' ya no me pertenece. La gente se lo apropió y guardó en el corazón. Este es mi álbum. Quiero compartir mis sentimientos con todo el mundo, pero no creo que deje que este disco deje de pertenecerme. Hay autodestrucción, luego autorreflexión y luego una especie de autorredención. Me siento lista. Realmente quiero que la gente escuche mi versión de la historia esta vez”, asegura en una entrevista concedida a Vogue, la primera en cinco años.
Y es que su nuevo trabajo es el reflejo de la travesía por el desierto en la que se convirtió su vida desde 2015. Una montaña rusa emocional a la que ha puesto música y voz. Después de recibir indicaciones de su terapeuta, la cantante, se sumergió en la soledad de su infancia y los problemas inexplorados con su padre que había estado evitando de adulta, lo que la llevó a algunas revelaciones sobre los patrones en su vida amorosa que luego dibujó en su música.
"No estar seguro de si alguien que se supone que te ama, lo hace de verdad, es difícil de aceptar. Lo asumes y te acostumbras. Así que mi relación con los hombres en general, toda mi vida, siempre ha sido: me vas a hacer daño, así que te lo haré yo a ti primero. Es tóxico y me impide encontrar la felicidad", comparte Adele, que en 2019 se separó de Simon Konecki, su pareja de toda la vida y padre de su hijo de 8 años.
Su nueva pareja y su hijo
Sin embargo, Richard Paul, el agente de estrellas de la NBA como LeBron James o Anthony Davis, ha sido capaz de romper esa dinámica. “Rich acaba de llegar. No me siento ansiosa, nerviosa o agotada. Es todo lo contrario. Es salvaje, y no hay dudas. Soy una madre divorciada de 33 años con un hijo. Lo último que necesito es convertirme en alguien que no sepa dónde está ni qué quiere. Sé lo que quiero. Y realmente sé lo que no quiero", señala la cantante que ubica a su hijo en el centro de todo.
“El nuevo álbum es también para él y trato de responder algunas preguntas realmente buenas, preguntas realmente inocentes, para las que simplemente no tenía respuesta una respuesta. Quiero que entienda a su debido tiempo por qué su madre voluntariamente eligió desmantelar toda su vida en la búsqueda de su propia felicidad. A veces lo hacía realmente infeliz. Y esa es una herida real para mí que no sé si alguna vez podré sanar", confiesa Adele.
El motivo de su cambio radical
Además, todo este tiempo dedicado a la introspección vino acompañado de una evidente metamorfosis: en dos años perdió 45 kilos. “Mi cuerpo ha sido objetivado durante toda mi carrera. No es solo ahora. Entiendo por qué es un shock. Entiendo por qué algunas mujeres se molestan especialmente. La peor parte de todo esto fue que otras mujeres estaban teniendo conversaciones brutales sobre mi cuerpo. Estaba decepcionada con eso. Eso hirió mis sentimientos. Pero sigo siendo la misma persona", comparte sobre su cambio radical, aunque causado principalmente por problemas de ansiedad.
“Los entrenamientos diarios no estaban orientados a perder peso, sino a volverme más fuerte. Necesitaba volverme adicta a algo para que mi mente estuviera bien. Y fue el ejercicio físico. La gente está sorprendida porque no compartí mi viaje. Están acostumbrados a que se documente todo en Instagram, y la mayoría de las personas en mi posición obtendrían un gran trato con una marca dietética. No me importa un carajo. Lo hice por mí y por nadie más. Entonces, ¿por qué iba a compartirlo? No lo encuentro fascinante. Es mi cuerpo", concluye Adele, que todavía no ha desvelado el título de su nuevo trabajo, aunque se especula con '30' para seguir con la tradición numérica. Pero estamos ante una nueva Adele. Nunca se sabe.