Se cumplen 40 años sin Bon Scott, el mítico vocalista de AC/DC
El segundo cantante principal de la banda australiana fue encontrado sin vida en su coche ahogado en su propio vómito tras una intoxicación etílica.
Hay bandas de música cuya música siempre será eterna y una de ellas es AC/DC, la banda australiana surgió en 1973 y fue fundada en Sidney por los hermanos 1973 Malcolm y Angus Young. En 1974 llegaría a la banda Bon Scott, pieza clave en el éxito de la joven banda y guinda de un pastel explosivo que convirtió al grupo de uno de los mayores mitos de la historia de la música. Precisamente mañana se cumplen 40 años de la muerte de Bon.
El cuerpo de Bon Scott fue encontrado sin vida en un coche en Londres, el cantante se había ahogado en su propio vómito tras una noche de fiesta y excesos. Los vicios de Bon, que le acompañaron durante toda su vida, fueron los que acabaron con la vida del artista. Su voz se apagó, pero siempre será eterna gracias a las canciones que grabó junto a la banda.
Infancia y adolescencia dura
Bon, escocés de nacimiento, emigró con tan solo 6 años a Australia, viajó junto a su familia en busca de nuevas oportunidades tras huir de un país en plena reconstrucción por culpa de la Segunda Guerra Mundial. Desde muy joven decidió dejar los estudios y vivir de lo que le daba la calle, en la mayoría de los casos suelen ser trapicheos y un estilo de vida de dudosa moral.
El cantante desempeñó distintos trabajos a lo largo de su vida, llegó incluso a ser pescador de cangrejos y a medida que fue creciendo pasaba más tiempo en los bares, donde conoció una de sus grandes pasiones que además, le acompañaría hasta el fin de sus días: meterse en líos.
Desde muy joven se metió en todas las peleas habidas y por haber y cometió pequeños delitos como robos o falsificación de documentos, por lo que fue internado en un reformatorio. De ahí recaló en el ejército donde sería expulsado por conducta inapropiada.
Cuando conoció al ‘Rock’
Bon Scott tenía todas las papeletas para terminar quien sabe si en la cárcel por el historial que llevaba o tal vez en algún sitio peor, pero de repente conoció algo que enderezaría más o menos su vida: el rock.
El joven Scott deambuló por numerosas bandas de rock donde en algunas de ellas ni cantó, pero fue aprendiendo sobre la música y lo que significaba formar parte de un grupo. La vida de Bon seguía dando tumbos hasta que al fin recaló en las filas de los Fraternity, donde moldeó su voz y su figura, importante años después para que AC/DC alcanzara el éxito que alcanzó.
El alcohol y AC/DC
Aparte de la música y de meterse en líos, otra de las grandes pasiones de Bon Scott fue el alcohol. El músico era siempre feliz con una botella en la mano y quizás esa adicción al alcohol junto a las casualidades del destino fueron lo que hicieron que Bon se convirtiera en la leyenda que es hoy en día.
El cantante sufrió un importante accidente tras colisionar su motocicleta con un vehículo cuando conducía un día que iba totalmente borracho. Esto le causó una lenta recuperación y cambió sus planes respecto a la música, olvidándose totalmente de ella y centrándose en otros quehaceres. Un día su suerte cambió y consiguió un trabajo como conductor de AC/DC, una banda en pleno desarrollo y con problemas con su vocalista, Dave Evans.
Bon encandiló rápidamente a los hermanos Young, fundadores de la banda, y se convirtió rápidamente en el cantante principal de la agrupación y el resto ya es historia. Juntos se convirtieron en un cóctel explosivo y máximos exponentes del hard rock, cuyas canciones han trascendido socialmente y se han instaurado como parte de la cultura popular en multitud de países, sonando en la actualidad sus canciones en millones de bares y discotecas de todo el mundo.
Declive de Bon
Puede que sin la ayuda del alcohol AC/DC jamás se hubiera cruzado en la vida del vocalista, pero sin duda dicha adicción fue la que marcó el principio del fin en la vida de Bon. El artista también probó drogas como la heroína, cocaína o marihuana, de hecho, la primera vez que probó la heroína tuvo una sobredosis que casi acabó con su vida, pero profesaba un especial gusto por el alcohol: se hacía alguna que otra rayita, igual que todos, y tenía su marihuana, pero nunca se dio el caso de que le entrase la paranoia si no tenía su dosis", explicaba Perry Cooper, uno de los ejecutivos de una discográfica que trabajó junto a la banda.
El fin de Bon llegaría poco después de sacar a la luz una de las canciones más emblemáticas de la banda, ‘Highway to Hell’, la cual terminó de catapultar al éxito a la agrupación musical. El artista una noche de febrero de 1980 se presentó en casa de un amigo de la banda llamado Alistair Kinnear, donde apareció totalmente borracho. Alistair ayudó a Bon y lo llevó hasta su coche donde pensó que podría descansar y pasar la resaca del día siguiente, sin embargo, el cantante sufrió varios vómitos y una hemorragia que acabaron con su vida.
La banda consiguió suplirle con Brian Johnson, un gran cantante con el que AC/DC ha alcanzado el éxito internacional, pero sin el carisma de Bon que a pesar de que su luz se apagó en la Tierra, empezó a brillar de manera desmedida en el cielo del ‘Rock’, donde hoy por hoy es una de las mayores leyendas del género.