¿Por qué Santana jugó Wimbledon con el escudo del Madrid?

Manolo Santana (Madrid, 1938), uno de los grandes deportistas españoles de todos los tiempos, falleció en Marbella a la edad de 83 años. El tenista madrileño ganó cuatro Grand Slam, pero en uno de ellos, en Wimbledon lució el escudo del Real Madrid. ¿Por qué? Manolo Santana ingresó en la sección de tenis del conjunto madrileño a comienzos de la década de los 60 (estaría hasta comienzos de los 70). Como integrante de esa sección compitió en numerosos torneos. El mismo día de la final del torneo de hierba inglés, 1 de julio de 1966, y con el madrileño ya clasificado para jugar la final ante el americano Dennis Ralston (curiosamente le había derrotado previamente en la final de Queen’s), Raimundo Saporta, la mano derecha de Bernabéu y ojo avizor a todo lo que rodeaba al conjunto blanco, cogió un vuelo con destino a la capital inglesa. Una vez allí, se dirigió al hotel donde se alojaba el tenista madrileño y le hizo entrega del escudo de la entidad madridista. Fue el propio Santana quien pidió a un empleado del hotel que le cosiera el escudo en el polo con el que jugaría la final. Y así fue.

"Sabía que me la jugaba porque en el All England Club son muy estrictos con el protocolo y podían haberme sancionado por llevarlo, pero debió gustarles como jugué y no me dijeron nada", explicaba tiempo después el propio Santana. Lo cierto es que derrotó a Ralston (6-4, 11-9 y 6-4) en un enorme partido, que tenía su miga: el propio Santana había renunciado a participar en Roland Garros para intentar conquistar el prestigioso torneo de hierba. Estuvo en Londres aclimatándose al tiempo y a la superficie. Todo ese trabajo oscuro tuvo su merecida recompensa… y una nueva anécdota en la entrega de trofeos con la Duquesa de Kent: desconociendo el protocolo, la tomó la mano ante los asustados socios. "¡Ella tiraba para arriba y yo para abajo! Pero luego me invitó a tomar el té de las cinco con su familia y me dijo que mi juego le gustaba".

Posteriormente el Madrid le agradecería su enorme madridismo nombrándole Socio de Honor (como son otros grandes deportistas españoles, caso de Pedro Ferrándiz, Rafa Nadal, Del Bosque, Fernando Alonso o Sergio García, entre otros) y otorgándole la insignia de oro y brillantes del club. "Es el torneo que todo el mundo quiere ganar. Cuando lo conseguí, me sentí totalmente realizado", contaba siempre que podía. Y lo hizo con el escudo del Madrid cosido en su polo de vestir.