NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

¡Pues claro que había Liga! Ayer se vio

Actualizado a

Como el título atrae muchas miradas, ya hace meses que se planteaba aquello de: “¿Hay Liga o no hay Liga?”, a medida que el Barça se iba distanciando. En algún momento, quizá cuando el Madrid cayó en el Camp Nou, hubo consenso: no, definitivamente ya no hay Liga, la ha liquidado el Barça. Pero ya se ve que no era así. LaLiga reparte otros seis premios con otras tantas plazas de clasificación para Europa, y también tres terribles castigos en forma de descensos a Segunda. Una de esas plazas quedó adjudicada al Elche desde antes incluso de que el Barça fuera campeón matemático, pero para las dos restantes había mucho que decidir en la jornada de ayer.

Todo eso junto nos ofreció dos horas trepidantes, con las radios cantando goles y cálculos y Movistar ofreciendo esa montaña rusa en un ‘Multifútbol’ donde todo era chicha. Cuando aquella tormenta escampó, el Espanyol estaba en Segunda cargado de lágrimas y rabia porque antes del 2-2 del Valencia había marcado César Montes de cabeza para los pericos lo que pudo ser un 1-3 salvador, pero Gil Manzano se lo anuló y, desde el VAR, Del Cerro no le rectificó. No vi falta, tampoco Iturralde. Darder reconocía que no se baja en una jornada por un error arbitral, sino por hacer las cosas mal muchos meses. Cierto, pero con ese gol aún estaría en Primera

El Valladolid, el Celta y el Almería siguen comprometidos y, aunque muy remotamente, también el Valencia, el Getafe y el Cádiz. Por arriba, el Atlético aseguró la tercera plaza, lo que le mete en la Supercopa, que da dinero y escaparate. Lo consiguió con un golazo de Griezmann a la Real, que pese a todo se fue contenta, porque aseguró plaza Champions, como el Betis aseguró plaza Europa League. Y para la última jornada queda en juego, además del tercer descenso, la plaza Conference League entre Osasuna, Girona, Athletic y Rayo. Mientras todo eso pasaba, el campeón despedía a Jordi Alba, Busquets y al viejo Camp Nou. ¡Vaya si había Liga!