Primero Griezmann, luego el resto

Lástima el maldito esguince de tobillo. Varó al mejor jugador del Cholo y mejor futbolista de la Liga, el más completo, con una regularidad pasmosa, de años y años, en el peor momento de la temporada rojiblanca, cuando el Atleti comenzaba a jugarse los títulos. La vuelta de la semifinal de Copa ante el Athletic. Lo que llegara de Champions. Pero Griezmann se torció el tobillo en la ida de octavos ante el Inter y la fatiga terminó por empañar su rendimiento. Regresó pero cada partido jugado después ha terminado con un bolsón gigantesco alrededor de su articulación.

Porque lo peor de esa dolencia es lo mismo que le ocurrió al francés cuando volvió al Atleti y una entrada por detrás de Carvajal le lesionó en un derbi: que no sabe estar con dolor o parado. Aquella fue la primera lesión larga de su carrera, con 30 años. Entonces le costó meses regresar y ahora, aunque haya vuelto, también. En la temporada hubo dos Grizi, el que superó el récord de Luis antes de la lesión y el de después. Y, aunque el de la bolsa de hielo no haya sido el mismo, es el máximo goleador del equipo en esta 23-24 (21) y referente. Todo mejora al pasar por su bota. Pero no es solo talento, es compromiso, carisma. La prioridad debe ser construir a su alrededor. Con jugadores como Griezmann el Atleti puede aspirar de verdad a todo. Competir como él lo hace. Y ganar los títulos que, como mejor jugador del mundo, a nivel de club también merece.

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