No hay Madrid sin fútbol
El Real Madrid, representado por Modric y Carvajal, recibió el premio al Mejor Equipo de manos de Nadal en su ciudad, que acogió los Laureus por segundo año consecutivo...


Lindsey Vonn, una de las grandes deportistas de la historia, dos veces galardonada en los Oscars del deporte, abrió la Gala de los Premios Laureus como presentadora con una pequeña broma: “Como miembro de la Academia que soy, puedo asegurar que votar cada año a los nominados es casi tan difícil como hablar con un madrileño cuando hay un partido de fútbol”. La chanza de la esquiadora fue premonitoria, porque el fútbol se convirtió, a partir de sus palabras, en uno de los protagonistas de la noche en una edición muy especial de estos Laureus World Sports Awards: el 25º Aniversario.
El Real Madrid recibió el premio al Mejor Equipo en su ciudad, Madrid, que acogió los Laureus por segundo año consecutivo. La entrega tuvo magia. Por un lado, por su presentador, Ruud Gullit, uno de los ases del fútbol europeo, que recordó sus grandes duelos contra los merengues. Y, por otro, por su entregador, Rafa Nadal, un mito del deporte que es casi tan madridista como leyenda del tenis, que ya es decir. De sus manos recogió el trofeo el capitán, Luka Modric, acompañado por el segundo capitán, Dani Carvajal, ante la mirada del presidente, Florentino Pérez, sentado en la mesa principal.
Carvajal podría haber recogido también el premio como campeón de la Eurocopa, pero no pueden ganar todos, y esta vez el Madrid fue elegido por delante de la Selección y del FC Barcelona femenino. Sí recayó ese honor en otro integrante de La Roja, el emergente Lamine Yamal, destacado como Mejor Aparición. Dos premios españoles que la Academia de los Laureus tuvo el buen gusto de convertir en tres, con una distinción especial al retirado Nadal, que escuchó el aplauso más sonoro y prolongado, entre otros de dos invitados excepcionales: el rival con quien más veces ha jugado, Novak Djokovic, y su sucesor español, Carlos Alcaraz.
Más allá del fútbol y del tenis, el deporte más premiado en los 25 años de Laureus, una gala posolímpica no hubiera tenido sentido sin un fuerte abrazo a los Juegos de París 2024, que acapararon las dos estatuillas individuales principales: la gimnasta Simone Biles y el atleta Armand Duplantis, como Mejores Deportistas del Año. Otros dos campeonísimos que dieron brillo a una gala plagada de estrellas... bajo el cielo de Madrid.
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