El Atlético intentó convencer a Lodi para que siguiera en el club pero el brasileño, con el horizonte del Mundial, prefirió buscar en la Premier los minutos que aquí no iba a tener. Llega Reguilón y algunos ya le empiezan a machacar por su pasado madridista. Son los mismos que se pondrán de su lado cuando el futbolista empiece a rendir. Nada nuevo en esto del fútbol. Me consta la ilusión del lateral izquierdo por jugar en el Atlético. No tiene pedigrí rojiblanco pero él será el primer interesado en hacerlo bien cuando el Cholo le dé una oportunidad. En este caso me alineo con Simeone. Al principio tampoco gustaban ni Juanfran ni Filipe Luis y luego se convirtieron en dos históricos del equipo madrileño. Son dos espejos en los que Reguilón puede mirarse. Más recientemente llegaron Marcos Llorente y Hermoso y se acoplaron ambos perfectamente al club del Metropolitano. Ni un reproche con un futbolista que lo da todo en el campo.
Lo que hace falta es que Reguilón se recupere de su lesión y demuestre los motivos por los que Berta y Simeone le han ido a buscar. Lo demás son fuegos de artificio. Los veteranos de la plantilla, los Koke, Oblak, Savic y compañía, arroparán al madrileño para que se sienta como en casa. El Atlético, a poco del cierre del mercado, ha logrado retener a sus figuras. Pocos clubes españoles pueden decir lo mismo. Aunque vende más decir que todo va mal y recordar que el recién llegado jugó en el eterno rival. Pero a esto me niego. Lo más sensato es darle la bienvenida y desearle lo mejor. Porque lo mejor para él será también lo mejor para el Atlético y para su afición.