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Luis Alberto, la amenaza en una Lazio golpeada

Un segundo puesto muy meritorio. La proeza del Nápoles y el impacto mediático de la semifinal de Champions entre el Inter y el Milan hizo que fuera de Italia pasara más desapercibida la gran temporada de una Lazio que no partía entre los favoritos para acabar entre los cuatro primeros de la Serie A y que consiguió un subcampeonato de mucho valor. De esta manera, Maurizio Sarri logró en su segundo año al frente del conjunto romano superar con creces la clasificación del primero, cuando fue quinto. Su asignatura pendiente fue Europa, con resultados muy discretos en ambos cursos tanto en la Europa League como en la Conference.

Un duro arranque. El partido contra el Atlético llega en mal momento, con cierto pesimismo alrededor del equipo. La Lazio ha sumado sólo tres puntos en las cuatro primeras jornadas: empezó con dos derrotas insospechadas frente al Lecce y ante un recién ascendido Genoa que fue capaz de vencer en el Olímpico y, aunque pareció darle la vuelta a la situación con un triunfo de prestigio en Nápoles, el 3-1 encajado este fin de semana en Turín ante la Juventus ha vuelto a instalar la preocupación en el entorno del club.

Dos sustitutos para Milinkovic-Savic. La marcha del centrocampista serbio al Al Hilal saudí por 40 millones fue la noticia del verano en el club romano. La entidad no hizo ningún gran desembolso para suplirlo, pero se movió con inteligencia y logró incorporar a dos buenos centrocampistas como el japonés Daichi Kamada, que llegó libre tras acabar su contrato en el Eintracht, y el francés Matteo Guendouzi, cedido por el Marsella. Por ahora, el nipón, un sensacional llegador, está ofreciendo un buen rendimiento, con el gol de la victoria en Nápoles como momento estelar. El francés, más dotado para la distribución desde la base, llegó más tarde y el de hoy podría ser su primer partido como titular. Cataldi sería el que se caería del once con respecto a los últimos envites.

Arriba, los peligros de siempre. En ataque se mantienen los mismos nombres propios de las últimas temporadas. Ciro Immobile es el goleador; Luis Alberto, el gran talento en tres cuartos, y Zaccagni, Felipe Anderson y Pedro Rodríguez se disputan las dos plazas en los costados. El mediapunta andaluz es probablemente el que ha empezado más inspirado la temporada, con detalles de gran clase. Su capacidad para jugar entre líneas representará una amenaza para un Atlético que no supo defender esa zona ante el Valencia. Immobile, en cambio, ha empezado peor: sólo ha anotado un gol en lo que va de temporada y su curso pasado ya fue numéricamente el peor de los siete que lleva en la Lazio. A sus 33 años, preocupa que pueda haber iniciado un declive, ya que su equipo ha vivido en gran medida de su efectividad. Sarri, de hecho, ha reconocido que el problema en este inicio de campaña ha estado en las áreas. El centro del campo, una zona fundamental para su estilo asociativo, no le ha disgustado, pero cree que ha faltado pegada y que en defensa se han concedido goles muy evitables.