La sala de máquinas está fundida
Después de la derrota en la Supercopa Ancelotti tiene que remangarse para encontrar solución a varios problemas que comprometen el futuro inmediato del equipo en las competiciones que quedan por delante. Uno de los principales es recuperar la mejor versión de dos tipos que no tienen recambio en la plantilla como Modric y Kroos. Croata y alemán están muy lejos de su mejor nivel y el italiano no tiene recambio para ninguno de los dos. Con ambos fuera de forma y Casemiro liderando al Manchester, el Madrid ha perdido el corazón que le ha hecho latir en la última década. Los jóvenes que vienen no están apretando y urge recuperar la mejor versión de los dos veteranos ante una cuesta de enero que puede marcar el devenir de la temporada.
Está claro que no van a ser eternos y que el bache podía ser más o menos previsible, pero puede ser más grave y tener peor remedio de lo que en principio parecía.
Ahora vienen muchos encuentros consecutivos muy importantes en los que no vas a tener tiempo de darles un respiro. La plantilla, entre lesionados y desaparecidos, es corta y tiene poco recorrido. Los que juegan son muy buenos pero casi siempre son los mismos y con poco margen de error. Y si en la sala de máquinas tus dos pilares están fuera de punto, todo alcanza un grado de dificultad mayor. Repetir algo similar a lo del año pasado es difícil; sin Modric y Kroos en su mejor versión se convierte en una misión imposible