Era imposible que el Tour estuviera acabado

En dos días hemos tenido un muy buen espectáculo en Pirineos. Esta sexta etapa tuvo un resultado muy diferente y tanto Vingegaard como Pogacar nos han sorprendido los dos. Jumbo, para mí corrió bien, pero en el último puerto, tienes que jugar tus cartas y ponerte a rueda, porque eras el líder. El danés tuvo que dejarle la responsabilidad a Pogacar. Quisieron pegar un zarpazo al Tour y por eso atacaron en el Tourmalet. Pararon bien a Van Aert, pero al final, cuando lo prueba Vingegaard sin soltar a Pogacar, debió parar a ver qué hacía el esloveno, que era el que tenía que descontar tiempo. Pogacar tiene un talento descomunal, era imposible que el Tour estuviera acabado. Él quizás también tenía dudas después de la quinta etapa, y eso le hizo correr con el freno de mano echado. Al ver que no le han soltado se ha crecido. Pasara lo que pasara, el Tour no iba a quedar decidido.

Lo de Carlos Rodríguez es impresionante. ¿Le vemos luchando para el podio? Eso es meterle presión. Vamos a dejar pasar el día a día y bienvenido sea lo que llegue. Está a nivel de ser tercero. Hoy, después de Pogacar y Vingegaard, Carlos fue el mejor, atacando y llevando la iniciativa en el último puerto. Quizás ni él se esperaba este rendimiento. Hasta el domingo tendremos un pequeño respiro, con dos días que serán otro tipo de etapas. Veremos a los esprínters en acción. Se pueden intentar los abanicos, pero es difícil sorprender. La mayoría de equipos tienen complicado pillar por sorpresa a bloques como Jumbo y UAE.