Ejemplar Mbappé
Seis meses después de iniciada la temporada, la balanza del peso en el vestuario de Vinicius y Mbappé, ha cambiado. Si el año comenzó con el brasileño luciendo galones y siendo bandera del campeón, con el francés tímido, prudente y afectado por la responsabilidad, hoy Kylian se ha convertido en ejemplar, mientras que Vini vuelve a ocupar el lugar del díscolo incorregible. Después de demostrar en una buena racha de partidos que había superado la tensión que supone llegar al Madrid, y que afecta a cualquiera por muy estrella que sea, Mbappé ofreció una rueda de prensa para mostrar su actual estado de confianza futbolística y personal. Convenció a todos.
Se mostró humilde reconociendo que lo había pasado mal, que jugó tensionado, nervioso y que se asustó. Contó con naturalidad que fue consciente de estar en un vestuario de números uno y que tenía que agachar la cabeza cuando otros tomaban la palabra, como lo que era, un recién llegado. En ese periodo de incertidumbre, no protestó, no montó ningún número en el campo, ni acosó al árbitro ni se enfrentó a cada rival que le apretaba fuerte. Aguantó el tipo, se comportó con profesionalidad y no se perdió en disputas infantiles. Quizás esa actitud sirva para que se le respete más en todos los sitios, en casa y fuera, y debería ser un ejemplo para Vinicius de que no hace falta enfrentarse al mundo para motivarse y ser un killer. No hace falta ser antipático, ni provocador, ni colérico, ni iracundo, ni temperamental. Solo hay que ser bueno.
Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todo el deporte en un solo espacio: la actualidad del día, la agenda con la última hora de los eventos deportivos más importantes, las imágenes más destacadas, la opinión de las mejores firmas de AS, reportajes, vídeos, y algo de humor de vez en cuando.