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Ante el Espanyol, la final de las finales

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Con una jornada menos, nos quedan todavía cuatro semanas de agonía hasta la resolución de las dos plazas de ascenso directo. Una lucha de cuatro equipos, en la que todavía incluyo al Espanyol, de la que puede salir cualquier tipo de combinación posible. La última jornada ha sido buena para el equipo de Pezzolano. Cierto es que pudo ser mejor si el Leganés no hubiera ganado en el minuto 93, pero el tropiezo del Espanyol y mantener la situación como estaba tras jugar fuera de casa y con el Eibar que tenía su partido más fácil, lo hubiéramos firmado antes de jugarlo. La derrota del Elche también ayuda ya que los ilicitanos quedan fuera de cualquier posibilidad de ascenso directo. Por tanto, Real Valladolid, Leganés y Eibar se lo van a jugar y el Espanyol podrá meterse en la ecuación si gana en Valladolid. Como pierda o empate queda fuera.

Por eso es tan importante el partido del próximo sábado en Zorrilla. Una victoria descartaría ya a un rival directo y dejaría la lucha de las dos plazas de ascenso directo para tres equipos. Y esa victoria metería una terrible presión al Leganés para su viaje a Albacete y al Eibar para su complicada salida a casa del Levante. No olvidemos que el Albacete lleva tres victorias seguidas, una de ellas ante el Eibar, y que el Levante también viene de ganar, y en su casa y jugándose el playoff, es un enemigo peligrosísimo.

También puede darse el caso opuesto. Un tropiezo blanquivioleta y pasar a dejar de depender de sí mismo. Sería el peor escenario. Por eso, lo que hay que hacer el sábado es ganar pero lo que bajo ningún concepto puede hacerse es perder. No firmo el empate pero sería el mal menor y dejaría al Real Valladolid dependiendo de sí mismo. No lo olvidemos.

Ganar al Espanyol es medio ascenso, pero perder es complicar mucho las cosas. Por eso hay que catalogar el partido como de decisivo. Es importante saber ya que habrá lleno asegurado y que Zorrilla será la caldera que pidió Ronaldo en la entrevista que le pude realizar en los micrófonos de la Cadena SER. Unión afición equipo, no puede ser de otra forma. Ambientazo.

Y tras el partido de Miranda, algunas claves a reseñar. El equipo sigue muy sólido atrás, concede poco, no le llegan por el centro y los lanzamientos laterales les solventa con seguridad. En la primera parte dio demasiadas facilidades defensivas por el costado izquierdo. Escudero no es un gran defensor, pero si tiene que recuperar la posición retrocediendo desde el centro del campo, cuidado. Si los volantes no ayudan, el extremo no puede con todo. En la segunda parte se corrigió el asunto. Y hay que corregir con urgencia el asunto del delantero centro. El rendimiento de Negredo está muy por debajo de lo que el equipo requiere y la vuelta del mejor Marcos André, hasta que vuelva Sylla, sería la mejor solución. Visto lo visto, Meseguer se antoja imprescindible otra vez para la visita del Espanyol. Con Lucas Oliveira asentado, pocas más novedades habrá. Pero haber ganado en Miranda no significa que no haya cosas que corregir. Saltaron a la vista. Y cuidado con las indecisiones de Masip. Una por partido. Nos llegan poco, pero no hace falta echar una mano a los rivales. Tiene que mejorar y dudar menos.

Las cosas van bien y el Pucela está en el buen camino, pero queda mucho por recorrer. Doce puntos en juego pueden dar para mucho. Las cuatro semanas de agonía parecen garantizadas. Prepárense bien, por lo que pueda pasar.

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