La historia acoge la historia

Se dice que el Madrid juega esta noche en París. Se puede decir, pero no es cierto. El estadio no se ubica en la capital, sino en otra ciudad llamada Saint-Denis y cuyo pasado no tiene nada que envidiar a nadie. Porque no muy lejos del sitio donde el equipo merengue va a intentar conquistar la decimocuarta se encuentra, en el seno de una preciosa basílica, la necrópolis de los reyes de Francia. Ahí se han enterrado, en más de mil años, a nada menos que 42 reyes, 32 reinas y 63 príncipes. Incluidos Enrique IV, Francisco I y Luis XIV, por nombrar a los más famosos y las españolas Ana de Austria y María Teresa de Austria, respectivamente madre y esposa del rey sol. Así que podemos afirmar que hoy la historia de Francia acoge la historia del fútbol.

No hay mejor lugar en el mundo para el rey de Europa, el rey del fútbol que la mítica ciudad de Saint-Denis. Justamente, hace unos días, me contaban desde el ayuntamiento que el martes 3 de mayo, cuando el Liverpool se clasificó para la final, la petición de entradas reservadas para el público subió enormemente. Pero al día siguiente, cuando el Madrid eliminó al City, la demanda fue una locura. "Ha sido increíble y muy significativo", me confesaron. Francia ama al Madrid y Francia quiere ver ganar al Madrid. En Saint-Denis, el Madrid se sentirá en casa.