El PSG ya existía antes de Qatar
Uno de los tópicos más recurrentes en cada eliminación del PSG en Champions es el de repetir que el PSG no tenía historia antes de la llegada de QSI, fondo de inversión vinculado a Qatar. No se engañen. Este equipo, por muy joven que sea (fundado en 1970 tras la fusión de varios equipos de la región) adquirió un status importante en los años 90. Sí, fue por la inversión de Canal Plus Francia, pero París fue durante muchos años un equipo capaz de mirarle a la cara a los mejores de Europa.
Los aficionados son soberanos, como el pueblo en unas elecciones democráticas. La soberanía de un club reside siempre en ellos. El público del Parque de los Príncipes dijo basta este domingo. Están hartos de su club, ese que en su día eliminaba al Real Madrid de la UEFA o tuteaba a equipos como el Bayern o el Barcelona en competiciones europeas. Lo que anhelan los hinchas del PSG es volver a recuperar la identidad, esa que parece haberse diluido, con Qatar. Club de estrellas con poco apego a la entidad, cambios de camiseta constantes por cuestiones de patrocinio y un estadio que ya no respira tanto fútbol como hace 20 años.
El PSG existía antes de Qatar, existe con Qatar y existirá después de la inversión del emir. Si uno repasa la nómina de jugadores que ha tenido este equipo, se sorprenderá. George Weah, Balón de Oro en 1995, ganó el prestigioso galardón por haber guiado al PSG a sus primeras semifinales de la Copa de Europa. Por la capital francesa también pasaron jugadores como el talentoso Ginola, Raî, Lama, Valdo, Okocha o Ronaldinho, que antes de convertirse en el mejor jugador del mundo en el Barcelona se erigió como un futbolista extraordinario en el Parque de los Príncipes.
El PSG se ha convertido en noticia por jugar con su primera equipación en el Parque de los Príncipes. La pérdida de identidad ha terminado con la paciencia de los aficionados, que piden una dirección deportiva coherente y no un director deportivo, Leonardo, que triture entrenadores, no respete a las leyendas del club (Thiago Silva o Cavani) y que no sea más noticia por bajar al túnel de vestuarios a quejarse a los árbitros que por su rendimiento en los despachos.
El PSG afronta los meses más importantes de la era QSI. El Emir, Al Thani, puso como fecha clave noviembre de 2022 por el Mundial de Qatar y la realidad es que el peor momento del proyecto ha llegado precisamente este año. Urgen cambios, urge recuperar la esencia del PSG, que, aunque nunca fue un grande de Europa, comenzó a forjar su historia en los años 90. Es el único equipo francés junto al Marsella con un título europeo en su haber (La Recopa de 1996). El PSG existía antes de Qatar. Por mucho que QSI le haya colocado como el equipo más importante de Francia, la realidad es que el dinero no compra todo aunque en ocasiones camufle los verdaderos problemas. Pero lo que no se puede comprar es el sentimiento del aficionado, que exige cambios desde ayer.