Lo que ocurrirá en el Madrid cuando Kroos y Modric cuelguen las botas es toda una incógnita. Los dos, junto con Casemiro, han formado un trío estelar no sólo para el equipo blanco, sino para el fútbol del continente. Han sido muchos los profesionales que se han rendido a este centro del campo de época. Pero nada es eterno, y el final de esta particular Santísima Trinidad está cada vez más cerca. Modric tiene 36 años y Kroos, que incluso ha abandonado la selección alemana para alargar su carrera en el Madrid, 32.

En los despachos del Bernabéu no son ajenos a este problema que se planteará en el futuro (en un futuro que ya es inmediato) y han movido ficha. Por eso vino Camavinga (19 años). Se tiene mucha fe en lo que pueda hacer Valverde (23), muy joven aún. Pero hay otros futbolistas en los que después de unos años ya no se cree tanto, y se piensa más en una salida que en un repentino resurgir. Es el caso de Ceballos. Isco termina contrato, Antonio Blanco es aún un tiro al aire... Es una evidencia que hay que seguir pensando en fortalecer esa línea de la plantilla.

Los esfuerzos del Madrid se están centrando ahora en fichar a dos jugadores vitales para el nuevo proyecto, Mbappé y Haaland. Ellos sentarán las bases del futuro, pero no hay que perder de vista que necesitarán estar respaldados, una red de seguridad que les permita desplegar sus virtudes. En Alemania corren cada vez con más fuerza las informaciones que hablan de Tolisso, que termina contrato con el Bayern este verano y encaja en esa nueva estrategia del Madrid de aprovechar los chollos que le ofrece el mercado. Pero no sé si será suficiente. Urge encontrar un sustituto de garantías para Modric, que será el primero en faltar. Hablamos de todo un Balón de Oro. Luego habrá que pensar en Kroos, el Arquitecto. Todo un reto.