El optimismo de acero de Laporta
Titulo con una frase que le cojo prestada a Valdano de un artículo de El País y que define perfectamente la forma en que el presidente culé afronta la situación. Lo de al mal tiempo buena cara se queda muy pequeño ante el espíritu indesmayable de este hombre, que en plena ruina del club que preside presenta a Ferran Torres, anuncia a Morata y advierte urbi et orbi que va a por Haaland y a por lo que sea. “Hemos vuelto”, dice, en actitud que La Vanguardia califica con acierto como ‘El espíritu de la pancarta’. Otra vez un ¡allá vamos! como aquel “Ganas de volver a veros” con el que se descolgó en la zona cero del madridismo.
Y, por supuesto, nuevo estadio. Más moral que el Alcoyano, se decía antes. Mientras, Mateo Alemany, mucho más prudente en sus manifestaciones, se desvive por abrir en las siniestras cuentas del Barça alguna rendija por donde colar el costo de Ferran Torres. Hay un par de sueldos tremendos en jugadores en la práctica inútiles, Coutinho (20 limpios) y Umtiti (13). Dembélé, que algo puede hacer a ratos sueltos, tiene 16. El club se daría con un canto en los dientes con que se fuese ya mismo a donde sea que haya pensado irse en junio y liberar la mitad de su ficha. Porque a los otros dos no veo que haya forma humana de colocarlos.
De momento, mientras consiguen o no inscribirle, Ferran Torres ha dado positivo en COVID para ir entrando en ambiente. Y también Laporta, lo que no es de extrañar, pues anduvo agarrado a él durante media jornada y aunque su optimismo sea de acero se ve que su organismo no lo es tanto. Mientras guarda cuarentena, Mateo Alemany seguirá con la tarea seria, tratando de trenzar el encaje de bolillos que tiene que presentar a Tebas para ver si cuela. De momento, Xavi sigue rearmando con paciencia un equipo en el que para el gol, en Linares, no podrá contar ni con Luuk de Jong que, dicho sea de paso, en Mallorca hizo lo que pudo.