'El puente sobre el río Kwai'
El Real Madrid ha ganado sus últimos ocho partidos, seis en Liga y dos en Champions. Ayer en San Sebastián, victoria, con el mejor once en este momento. Con un 4-3-3 con dos extremos de verdad. Vinicius sigue con una varita mágica, Militao enorme, y hasta Jovic, gol y asistencia, participó de una jornada fantástica para el madridismo. La lesión de Benzema, la peor noticia. El Madrid suma 39 puntos en 16 jornadas (seis más que el año pasado, en el que nos faltaron dos puntos para ganar la Liga). El Sevilla, con un encuentro aplazado, contra el Barcelona, a ocho. Sus vecinos del Betis, primer equipo en derrotar a los azulgranas de Xavi, a nueve. El Atlético de Madrid (con un partido menos), y la Real están a diez puntos. El Barça (ganas de volver a veros), detrás del Rayo, está a 16 puntos del Madrid. Los de Laporta, seguro que mejoran, están más cerca del descenso que del líder. Y el próximo domingo, derbi en el Bernabéu. Queda mucha Liga, así que es pronto para las trompetas de celebración que ya empiezan a hacer sonar algunos. Los partidos de Champions que viviremos en el puente de la Constitución, la próxima semana, serán del mismo género, épico–bélico, que El puente sobre el río Kwai, una película con siete Óscar. El Real Madrid, ya clasificado, se jugará ser primero de grupo contra el Inter en la capital de España. El Madrid es el único equipo, con más de dos participaciones, que se ha clasificado siempre en la fase de grupos, en 30 ocasiones. Los otros cuatro equipos españoles en lugar del himno de la Champions puede que oigan la famosa marcha silbada del coronel Bogey de la citada película.
Se juegan todo en ese último partido. El Barça, aunque depende de sí mismo, mirará a Da Luz. Lo malo es que jugará contra el club que más goles le ha hecho en los últimos años. Lo bueno es que el Bayern no se juega nada. El Sevilla también se clasificará si gana en la ciudad de Mozart, pero sólo si gana. Al Villarreal le bastaría el empate contra el Atalanta para clasificarse. El Atlético de Madrid no depende de sí mismo. Necesita la victoria y que sea por un gol más de diferencia que los italianos si vencen al Liverpool. Veremos quién cruza ese puente a octavos. No va más.