El GP de Emilia Romaña, la antepenúltima cita del Mundial de motociclismo, podría proclamar los dos primeros campeones. No será fácil que cuadren las matemáticas, pero en el deporte cualquier cosa puede ocurrir, y mucho más en las condiciones en las que se compite en Misano, con el asfalto mojado o semimojado en los libres y la clasificación, que dará paso a un firme seco en la carrera del domingo. Pedro Acosta, en Moto3, y Fabio Quartararo, en MotoGP, podrían salir laureados del Circuito Marco Simoncelli. Para su tranquilidad, tienen otros dos match balls en el horizonte: Portimao, el 7 de noviembre, y Cheste, una semana después. En la categoría restante, Moto2, todavía no hay perspectiva de campeón, porque Remy Gardner y Raúl Fernández aceleran codo con codo, separados solo por 9 puntos.

Quartararo tiene una cómoda ventaja de 52 puntos sobre Francesco Bagnaia, pero el italiano le está apretando de lo lindo en las últimas carreras. Pecco ha logrado en Misano su cuarta pole consecutiva, y ha ganado dos de tres, lo que ofrece una imagen de su poderío con la Ducati. El francés, sin embargo, ha tenido un sábado aciago y partirá en la 15ª plaza. Fabio se ha sentido inseguro sobre la humedad del circuito, y tampoco ha querido arriesgar, porque sabe que está asentado en el liderato, lo que obliga a Bagnaia a cargar con la presión. El salto del piloto de Yamaha ha sido enorme de la pasada edición a la actual, en la que está compitiendo igual de bien sobre la moto que con la cabeza. En sus cálculos, el título estaría más al alcance en el GP del Algarve que aquí. Mientras, a Pecco no le queda otra que intentar “ganar para alargar el Campeonato”, como él mismo apunta. Al español Acosta le pasa algo parecido a Quartararo en Moto3, con una ventaja que está dosificando ante el pujante Dennis Foggia. Este domingo sale quinto, 30 puntos por delante, con su rival, 14º. Todo es posible.