Sin miedo, como el 11 de julio de 1982

El 11 de julio no es un día cualquiera para los futboleros italianos. Un día como hoy en 1982, la Azzurra levantó en el estadio Santiago Bernabéu su tercer título mundial, esperado durante 44 años. Hoy puede ser la noche para acabar con el gafe de la Eurocopa. Solo ganamos una y ya pasaron 53 años de aquello: demasiados. Este torneo nos dio disgustos inolvidables, como el golden goal de Trezeguet en 2000, el biscotto de Dinamarca y Suecia en 2004, la paliza española de 2012... Ha llegado el momento perfecto para cambiar la historia.

Mancini levantó a Italia tras su peor humillación, pasando de no clasificarse a un Mundial a jugarse un título legendario esta noche. Hacerlo en Wembley y ante Inglaterra no complica la hazaña, la hace todavía más grande. Los talentos de Southgate asustan, pero en una final el peso de la historia se acaba notando. Italia ha jugado seis finales mundiales y con esta ya van cuatro en las Eurocopas. Lleva 33 partidos sin perder, sabe a lo que juega y en estas semanas también ha aprendido a sufrir como en sus mejores años. Será un partido difícil, por supuesto, pero no es la Azzurra la que debe tener miedo. El destino y la historia están a su lado: hay que llevar esta Copa a Roma, como hicimos en 1982, y dedicársela a Paolo Rossi. 'Pablito' estaría orgulloso de estos ragazzi.